Su visitante tiene que emplear la fuerza motriz que le proporciona sus piernas para recorrerla. Pero el ingenio no conoce barreras y los dos protagonistas de SPACE HOPPERS in VENICE montados encima de unas pelotas hinchables de látex con cuernos conocidas como Space Hopper a modo de jinetes pálidos.
Nos muestran a un ritmo vertiginoso la ciudad describiéndola de una forma diferente y con un final de impacto. El corto que podeis ver íntegramente AQUI se firmo en una sola jornada de trabajo en diferentes localizaciones de la ciudad. Grabado en formato Stop-Motion, se trata de un trabajo que pertenece a la cosecha personal de Shelley, que habitualmente realiza encargos para campañas de moda dentro de la agencia Milk and Blue. Trabajos en los que el margen creativo suele estar condicionado por los deseos del cliente.