Garajonay en la Isla de la Gomera, un bosque encantado entre la niebla


El archipiélago de las Islas Canarias se puede contemplar desde dos ópticas netamente diferentes, la primera que engloba y hace referencia a aquellos destinos masivos que como Tenerife, La Palma de Gran Canaria o Fuerteventura, los cuales representan destinos turisticos básicamente dirigidos a un publico que busca principalmente Sol y playa.


Y la óptica que por otra parte y en sentido opuesto ha logrado tras décadas de compromiso con el medio ambiente y la conservación de sus ecosistemas (algunos de ellos unicos en el mundo), debido fundamentalmente a su aislamiento continental. Encontrar un equilibrio entre la necesidad de desarrollar una oferta turística que cubra la demanda en constante aumento y una aplicación sostenible y racional de la oferta dirigiéndose a un público más selectivo.

En definitiva diseñar una oferta alternativa que aplicada de forma sensible con su entorno pueda aúnar desde una perspectiva sostenible la explotacion de sus recursos naturales en términos economicos. Sin que por ello implique un grave deterioro, y por lo tanto un impacto excesivamente negativo para el conjunto de sus hábitats naturales. Y por otra parte crear un espacio socio económico.


Lo suficientemente robusto que garantice a los diferentes actores involucrados y sus intereses generar los suficientes beneficios, a partir de los que más allá de las expectativas, prosperar tanto de forma individual, como colectiva. En este apartado se pueden en mayor o menor medida citar el resto de las islas, entre las que destaca desde mi punto la Isla de la Gomera.


Un pedazo de tierra que distando a una distancia de poco más de media de hora en avión desde el aeropuerto de Tenerife. Estando tan cerca que de hecho en los días claros, en los que la acumulación de nubes es minima se pueden ver desde alguno de sus numerosos miradores. Entre los que se podría citar el de La Carbonera, el de El Santo, o el diseñado por el escultor Canario Cesar Manrique. Aunque por encima de todos ello destaca el mirador de Abrante, que situado en el norte de la isla y construido enteramente en cristal te ofrece una vista de 360º, pudiendose divisar la silueta imponente del Teide, que desde el centro de la isla ostenta la marca de ser el pico más alto de España.

Un vuelo relativamente corto de alrededor de media hora que tras aterrizar en la única pista con la que cuenta su aerodromo, situada en las proximidades de la playa de Santiago, una cala ideal para aquellos que buscan pasar una jornada de playa sin excesivas aglomeraciones de publico. Siendo junto a las playas del Inglés y del Valle del Gran Rey tres de las más importantes de la isla. 

Vista del Roque de Agando desde lo alto de la cima del Garajonay

Está última merece especial atención porque es la culminación del valle que le da nombre, y que te sorprenderá su descubrimiento por la sucesión casi infinita de plataneras, que cubre prácticamente todo el valle como si de una alfombra se tratara. No lejos de allí como curiosidad todavía se mantienen los pilotes de cemento, que parcialmente anclados en el mar, servían para sostener una grua, que se utilizaba para cargar barcos con mercancias.


De un litoral que por otra parte y pese a lo escarpado de su cartografía cuenta con una numerosa selección de lugares donde poder disfrutar de las aguas del Océano Atlantico. Enseguida te pone en antecedentes de cuales son los principales atributos de la tercera isla más pequeña por tamaño del archipelago canario.

Y es que independientemente de que comiences tu visita tomando la principal carretera dirigiendote a San Sebastián de la Gomera, su principal núcleo habitado con alrededor de 20000 habitantes. O decidas posponer su recorrido para más adelente, optando por invertir tu tiempo en disfrutar de algunos de los muchos parajes con los que cuenta está reserva de la biosfera. 

En total la isla cuenta con una superficie estimada de poco más 369 kilómetros cuadrados, una cifra relativamente pequeña pero que sin embargo le permite albergar un patrimonio natural y cultural singular. Cuya diversidad es unica en Europa, lo que además de permitirle poseer algún tesoro natural único en el mundo. El cual debido a sus singulares características representa un antecedente de como en un pasado más o menos remoto parte de la área geográfica mas meridional del continente europeo estuvo cubierto con enormes extensiones de su territorio con Laurasilva.

Un tipo de bosque húmedo conformado principalmente por especies arbóreas pertenecientes a la familia de la Lauraceas o laureles que se distribuyen en zonas tropicales. Un accidente que hace miles de años era tan omniprepresente en la parte más meridional de Europa, y del que hoy en día tan sólo nos queda el área que comprende el Parque  Nacional de Garajonay.


Su espectacular y mágica selva tropical, y sus numerosas alternativas para poder descubrirla, hace del parque nacional de Garajonay un espacio natural único en Europa que hay que visitar.


Territorio que desde el centro de la isla abarca en total el diez por ciento de su extension lo que equivale a casi cuatro mil hectareas. Surcado por centenares de sinuosos senderos donde la alta humedad propiciada por los casi mil quinientos de altitud que alcanza el alto que da nombre a la reserva natural, destacando el Roque de Agando del cual se domina panoramicante la isla.


Lugar casi mágico donde además se puede escuchar si se presta antencion el Silbo, un dialecto único en el mundo y patrimonio inmaterial por la Unesco. Que todavía está vigente entre los lugareños, y que básicamente consiste en establecer una comunicación utilizando únicamente silbidos. Lenguaje no tan casual cuyo origen hay que buscarlo en la necesidad de los miembros de los primeros asentamientos que se aventuraron a explorar el interior de una isla modelada y constituida por desniveles muy pronunciados.


Aunque como ya he comentado predomina de forma mayoritaria la Laurasilva, también se pueden encontrar (entre otras variantes) especies endémicas como el Sauce Canario o el Madroño Canario. Que comparten su hábitat con otras colonias más minoritarias como la haya, el tejo, el brezo, el acebino, o el tilo, siendo el hábitat donde la fauna está protagonizada por aves siendo un lugar excelente para avistar especies nativas como la Paloma Turque o la Rabiche.

Dos troncos cubiertos de musgo se sumergen en la bruma de Garajonay 


Cuyos vuelos trazados en un cielo azul y predominantemente limpio, además te permitirá si te acercas cuando declina el día y alzas la vista hacia arriba contemplar parte de la vía láctea en todo su espendor. Un cielo cuajado de estrellas que te acompañará mientras tratas de descubrir un lugar casi mitologico donde dos amantes perseguidos se dieron muerte mutuamente.

Hechos trágicos que se produjeron tras un malentendido familiar y a partir de los se genero toda una leyenda, dando nombre a una isla también conocida como la Colombina. Por ser sus atracaderos la última escala que hizo las tres calaveras en las que viajaba Cristóbal Colon. Antes de continuar su travesía en su búsqueda de una nueva ruta que les permitiera encontrar una vía hacia las Indias. 


Aunque su característica principal es el bosque nuboso anidado entre barrancos, el espacio protegido de Garajonay también reune mitos y leyendas que te describen algunos de los episodios de la historia de la Gomera.


Y que en conjunto aparte de merecer toda la atención no solamente desde una perspectiva meramente natural, sino cientifica, ya que su enorme riqueza se proyecta desde el pasado, muy atrás en el tiempo. Pues muchos de los ejemplares de Laurasilva aunque no están datados, si se estima que pueden contar con una longevidad muy dilatada, por lo que en muchos casos se afirma que pueden alcanzar los mil años.   


Revelandonos algunas de las huellas de cuáles eran las características del paisaje de las que gozabamos en el Sur de Europa hace miles de años y sus pobladores. Entre los muchos alicientes con los que cuenta aparte de los meramente naturales, está los de la ermita dedicada a la virgen de Lourdes, un pequeño templo situado en lo alto de una loma y cuyo descenso te introduce en el perímetro de Garajonay. 
 
Monumento en homenaje al dialecto del Silbo que se practica en la Gomera

Completando una caminata que atendiendo a los encuentros que rozan lo mágico te asaltan maravillandote a cada paso que das cuando alguno de los muchos senderos que se han habilitado en el espacio protegido. Proporcionándote una sensación de estar caminando por un escenario casi irreal, percepción que tiene que ver con la persistente niebla que cubre sobre todo las partes más elevadas del parque, humedeciendo un paisaje que fluye y creando por momentos la sensación de estar viviendo en un sueño.

Aparte de la ruta de la ruta de la Ermita, destacar otras alternativas como la de La Laguna Grande, a la cual se llega tras veinte minutos de caminata y que te conducirá por un paisaje dominado por zonas clareadas de monteverde y un suelo abundante de musgo, así como un espectacular jardín compuesto por flores moradas. Producto de la eclosión primaveral que experimenta el parque. Lugar esotérico pues circula la leyenda de que en los catorce túmulos que hay en el centro de la llanura, se reunían las brujas para evocar sus akelarres. 

Otro lugar realmente sugerente es el de Raso de la Bruma un recorrido que atraviesa un exhuberante bosque de laurisilva propio de las laderas de barlovento donde la incidencia de la bruma del alisio es máxima. Circunstancia que produce que la abundancia de musgos colgantes en los troncos de los árboles y la riqueza de helechos, entre ellos la pirgua o píjara, o el helecho batatilla (Davallia canariensis) sea un rasgo que embellece el lugar. Entre los árboles merece destacar la presencia del Naranjero Salvaje Gomero.




Ya fuera de lo que es la reserva natural de Garajonay existe otras muchas paradas naturales que sin duda pueden ser altamente sugerentes. Pero yo te sugiero que si te gusta la espeologia visites, si tienes oportunidad la oquedad de la Cueva de Guahedum, la cual a pesar de no presentar una gran profundidad, conserva algúna referencia de los primeros pobladores que habitaron la isla, así como los restos de algún marido promiscuo e infiel.



OPEN Architecture, una vision radical que reinventa la arquitectura



Uno de los ámbitos creativos donde un gigante como China, con su enorme legado cultural ha dejado constancia de su increíble potencial en una diversidad de ámbitos socioeconomicos y culturales, pero quizá en términos creativos ha sido en el de la práctica arquitectonica donde más destacable ha sido esa aportacion.


Si en otras manifestaciones expresivas de la cultura Pop, su aportación está siendo cuando menos discretas, sino directamente anodinas. Pudiendose enumerar de más o menos pormenorizada cuáles son las causas de porqué en el resto de las disciplinas artisticas, por las que China no esta aportando lo que se presuponia en un principio, a este nuevo despertar. 

Cuando coincidiendo con la apertura que se propicio desde las altas esferas políticas durante la última del siglo XX, se crearon grandes expectativas atendiendo a los renovados aires que nos inundaban y que con fuerza soplaban desde el Este. Algo que se materializó principalmente gracias a la globalizacion de la economia. En cuanto al diseño arquitectónico si se puede afirmar con cierta objetividad.

Que incluso han superado las más prometedoras estimaciones, teniendo la oportunidad de asistir a la eclosión en las últimas dos decadas de una serie de estudios de arquitectura. Que aparte de ofrecernos diseños que se podrían catalogar como parte de eso que se ha dado en llamar el show de la arquitectura. Una corriente que por cierto ultimamente tengo la percepción de que parece empieza a mostrár claros síntomas de agotamiento.

Si considero que está construyendo una narrativa que nos está ofreciendo una sugestiva y variada gama de soluciones que desde lo local se están convirtiendo en muchas ocasiones en un estándar arquitectónico cuyas pautas están incorporando como parte de su dogma numerosos colosas en Occidente, que han visto en sus propuestas una nueva vía cuya lectura les permite aplicar estrategias más participativas.

Donde fundamentalmente el tratamiento del espacio se realiza bajo un enfoque donde la experiencia es compartida entre pares a partir de una perspectiva donde la convivencia es más que individual, aplicándose un enfoque colectivo. Una cosmovisión que se nutre tanto de su tradición arquitectonica, condicionada por su desbordante dermografia por un país que hasta hace relativamente poco ostentaba el primer puesto como el más poblado de la tierra.

Uno de los depósitos del complejo cultural TANK, rodeado de espacios verdes

Como por su ferviente deseo de cimentar una marca arquitectonica que refleje los anhelos de l@s ciudadan@s chinos de mostrar un compromiso con la realidad de una sociedad en constante cambio. Y de los cada vez más acuciantes desafíos a los que tanto en términos individuales como colectivos, así como humanidad nos tendremos que enfrentar ocupando buena parte de nuestro tiempo durante las próximas decadas.

Premisas que se contemplan en el Manifiesto publicado por el estudio de arquitectura OPEN Architecture, que con sede en la ciudad de Beijing y tras más de dos décadas de trayectoria e intenso trabajo. En el cual se han materializado en una selección de proyectos con los que han tratado de ser concruentes con el decalogo de principios o puntos a observar cuando se acepta un encargo y posteriormente se emprende plasmanddose sobre el papel.

Principios que como piedras angulares se han convertido en el hilo conductor a partir del que sus dos miembros fundadores han seleccionado seis proyectos de la arquitectura de su pais. Selección que se puede antojar reducida en síntesis a la hora de incluirlos en un volumen que tiene como objetivo ser reflejo y representación de lo que ha sucedido durante un período que abarca poco más de dos decadas.

Maxime si tenemos en cuenta las abrumadoras cifras que pueden llegar ha producir en el gigante asiatico. Un analisis de una realidad que editada coincidiendo con el inicio del otoño de 2022. Que aunque no pretendía huir de las premisas tan recurrentes por otra parte en este tipo de ediciones, como pueda ser el caer en recoger proyectos que se distingan por monumentalidad, o tener el potencial de convertirse en la punta de lanza de la enesima tendencia o vanguardia.

En un mundo tan incierto y cambiante, muchas cosas parecen ser caóticas, en la práctica de arquitectura tambien. Por lo que en el libro se interroga sobre cuáles son las premisas arquitectónicas que demanda la gente en un contexto de cambio.


Algo que por otra parte acaba reduciendose en un estereotipo sin estilo que se diluye en una serie de convenciones o correciones de carácter técnico/social que suelen ser olvidadas en más o menos tiempo. Titulado Reinventing Cultural Architecture: A Radical Vision (AQUI si desea comprarlo), como ya he dicho su lectura no me ha trasmitido en ningún momento que pretenda ser en una guía o libro de refencia al uso, cuyo índice se limite a enumerar estos o aquellas propuestas, que hayan reunido unas características por las que hayan superado la nota de corte.


En las poco más del centenar de páginas, que se abren con los escuetos párrafos del glosario de premisas arquitectónicas que como una oda se pueden recitar en clave poetica. No vamos a encontrar una enumeración de lo que un experto especializado en su área haya valorado como los mejores y elogiables edificios en función de su uso o estilo arquitectonico.


Sino que se trata de algo mucho más sutil, y que nos traslada a la epidermis, a la esencia que ha pulido durante un periodo de tiempo casi indefinible, incuantificable, que ha ido modelando sin embargo los rasgos y las habilidades constructivas de un pueblo. Las cuales son perfectamente identificables por cualquiera que haya tenido una mínima relación con el coloso asiatico.

Interior ovalado de la duna artificial que alberga el DUNE Museum a escasos metros de la playa

Pautas decimonicas que tras ese largo recorrido, sin embargo han sufrido un desgaste considerable, que ha puesto a toda una generación de nuevos profesionales plantearse el reto de revisar esos viejos valores y tras actualizarlos, influenciado por los nuevos dictados de la modernidad precedida por los estándares tenologicos. Incorporarlos a su praxis, produciendo una gama de diseños que supusiera una revalorizacion de su discurso arquitectonico.

Cuyo resultado final de cara al cliente fuera lo suficientemente atractivo, edificios en los que la forma, el tratamiento del espacio y de la luz, adoptarán el nuevo paradigma de eficiencia energética y economía de materiales, además de su compromiso inherente con el medio ambiente. Sin por ello renunciar a un cierto grado de comodidad y de una belleza emanada de una formas y la innumerables combinaciones que se puedan dar a la hora de aplicarle una determinada paleta de colores.

El manifiesto se centra en la palabra "conexión", utilizando los seis proyectos arquitectónicos que recoge el libro para conectar tres dimensiones en otros tantos niveles: entre el ser humano y las personas, entre el ser humano y la naturaleza, y entre el ser humano y su memoria. 


En el caso de los seis agraciados seleccionado por Li y Huang los matices se consiguen a partir de combinar tonos neutros que exploran las posibilidades del paisaje con el que llegan a mimetizarse como son el de la Chapel of Sound, el del Shenzen Martime Museum o el proyecto que cierra el libro, el UCCA Dune Museum. Tres propuestas cuyos paralelismos estéticos son obvios, pero que no solo guardan similitudes en sus planteamientos que buscan explorar conexiones con el paisaje que les rodea.


Sino que a pesar de que sus formas se inspiran en formas orgánicas, su composición en términos de materiales y construcción es totalmente artificial. Esta dualidad en el diseño puede en principio desconcertar. Pero no deja de ser coherente  desde el punto de vista holistico
siempre aplicando el concepto arquitectónico con el que iniciaron su trayectoria a finales del siglo pasado. 
Y que se resume en buscar una conexión entre los recursos que te ofrece el territorio y la praxis arquitectonica, para crear edificios que de forma integral se puedan adaptar a un mundo que está instalado en plena globalizacion. Si en la gruta de vocación animista que parece estar excavada en la roca de Chapel Of Sound usa materiales que emulan a las paredes rugosas de una caverna, en los bloques de hielo que parecen estar suspendidos sobre las aguas plácida de la bahía en el Shenzen Maritime Museum.

Conjunto de bloques que emulan a icebergs de un proyecto todavía inconcluso

Poliedros tridimensionales que a pesar de sus formas pulidas, son inconfundibles, transmitiendo instantáneamente de que estas rodeado por descomunales icebergs parcialmente sumergidos en el agua situados a escasas decenas de metros de los muelles. En el caso de DUNE Museum la imagen del edificio semienterrado recuerda a una de las muchas dunas que hay en las inmediaciones de las playas donde opera.


Las tres propuestas que ejercen de complemento con las que acabo de describir, no obstante si muestran divergencias constructivas que convendría apuntar. Ya que si tanto en The Sun Tower, como en los edificios de carácter casi épicos que albergan tanto la Pinghe Biblioheater como el nuevo conjunto de edificios del nuevo centro cultural de Shangai, si de alguna forma son herederos del paisaje local. 




En este caso ya sea reciclando unos tanques en desuso para transformarlos en salas de exposiciones o donde se excenifique una diversidad de espectaculos. O directamente realizando una intervención desde cero, contruyendo equipamientos cuyas formas estéticas obedezcan a las actividades que en algún momento se realiza en ese mismo lugar como en el caso de la Sun Tower, que como un faro emerge dominando la costa.


Y que aunque tanto en altura como en características técnicas dista mucho del original que en algún momento opero en la zona. Si mantiene un vínculo coherente cono su entorno, estableciendo un hilo conductor que nos habla como un susurro de la memoria que en términos cualitativoss y a través de la práctica de una arquitectura que como han declarado en numerosas ocasiones pretende conectar en diferentes contextos creando expacios de convivencia.



La fotógrafa Rebeca Binda en 5 Minutes, nos describe las consecuencias humanas y medio-ambientales de un vertido de deshechos mineros en Brasil



Rara es la temporada que como miembros pertenecientes y participantes de eso que conocemos como opinión publica, asistimos estupefactos a una serie de acontecimientos cuyo relato central y cuerpo informativo nos deja constancia sobre la enésima catastrofe medio-ambiental que está consumiendo nuestro planeta.


Desastres cuya autoria está protagonizada en mayor o menor medida por la presencia del ser humano, y cuya transcendencia mediática suele ser equiparable al impacto ecológico o los intereses económicos economicos que se han visto afectados. Episodios trágicos que en todo caso y dependiendo de la magnitud de los mismos suelen ser responsabilidad de grandes compañías.

Cuya capacidad financiera e influencia para operar globalmente implica que puede presionar con el objetivo de poder modificar los marcos normativos de determinadas regiones, que poseen por otra parte una gran riqueza en recursos casi siempre relacionados con la explotación y extracción de enormes reservas de minerales de todo tipo que han permanecido prácticamente inalterados durante milenios o millones de años.


Y que debido fundamentalmente a las mejoras en términos tecnológicos y a la voracidad de un mercado de consumo insaciable, se han acabado convirtiendo en un activo realmente apeticible. Por el que desde  grandes oligopolios occidentales se destinan cantidades de dinero con el que se depreda hasta la extenuación el territorio sobre el que se opera.

Derivandose unas consecuencias para el entorno y sus pobladores que en la mayoría de las ocasiones suelen tener casi siempre un efecto muy negativo. Uno de estos episodios cuyo accidente o mala gestión supuso una haceatombe y una fractura cuya transcedencia, todavía en la actualidad plantea serías dificultades a la hora de estimar el daño que se produjo tanto a la fauna como a la flora local.


Muchas especies endémicas que todavía permanecían sin catalogar, y por lo tanto y con casi absoluta seguridad se habrán perdido de forma irremediable para siempre. Algo que en  el actual contexto donde debido a los devastadores efectos producidos por el cambio climático se corre el peligro del que el noventa por ciento de la biodiversidad que alberga el planeta tierra se extinga definitivamente casi supone una anecdota.

En la mano derecha un puñado de tierra antes del desbordamiento, en la izquierda un bloque de tierra compacta y sólida producto de la riada de lodo

Fueron los vertidos que a lo largo de noviembre de 2015 contaminaron una extensión territorial equiparable a la de un país como España en la región brasileña de Minas Garais. Cuya traducción al castellano sería más o menos Minas Generales, (por definición resulta esclarecedora). Un departamento situado al Oeste del país que tiene frontera con dos de las regiones más ricas y desarrolladas de su vasto territorio como son el estado de Espíritu Santo y el megaturistico estado de Rio de Janeiro.  

Un lugar en definitiva muy codiciado debido a que posee una variedad de yacimientos de extracción de minerales como el hierro, el manganesio o el hierro. Así como piedras preciosas como el topacio y la aguamarina. O lo que representa su mayor tesoro, bolsas casi infinitas de hidrocarburos. Cuyos deshechos, los que se generan tras ser tratados se almacenan en presas como las de Fundão y Santarem que a una distancia de 35 kilómetros de la localidad de Mariana.


Eran gestionadas y responsabilidad de la subcontrata Samarco, filial de las compañías petrolíferas  BHP  y Vale SA. Cuando uno de los principales diques de contención reventó, hecho que se produjo el día cinco de Noviembre, cuando declinaba la tarde y las medidas de vigilancia se reducían coincidiendo con la finalizacion de la jornada laboral. Momento en que se producía una enorme grieta en la principal represa.


Con el espíritu de documentar un desastre natural en que ha intervenido directamente el ser humano, las imágenes de Rebeca Binda tratan de determinar gráficamente las causas y autoria del desastre.


Iniciándose en ese instante vertido que finalmente alcanzó la principal cuenca fluvial de la región, el río Doce. Un afluente de cuya agua se nutre la mayor parte del valle por el que discurre, y de cuya agua depende en mayor o menor medida las decenas de miles de personas que residen en alguno de los 230 municipios por lo que discurre, y que tras extenderse en las semanas sucesivas acabó abnegando un territorio similar al que abarca un país como la República de Portugal.

Llegando a contaminar algunas comarcas pertenecientes a los departamentos aledaños. Una colosal bolsa de deshechos que según avanzaba sin encontrar prácticamente oposicion, inundando todo tipo de propiedades ya fueran públicas o privadas, como fincas, lugares de pastoreo o la infinidad de tierras dedicadas al cultivo de todo tipo de vegetales.  Redactaba en mayúsculas y en negrita la mayor catastrofe natural.

Que hasta ese momento había sufrido Brasil, un país singular por otra parte en términos medioambientales. Ya que cuenta entre su privilegiada seleccion de espacios protegidos con ni más ni menos que la selva del Amazonas. Masa forestal considerada por su magnitud y diversidad el pulmón de nuestro planeta, por lo que suele estar sometida a un continuo estrés y amenaza medioambiental.

Interior de una de las aulas de la escuela de Paracatu después de la riada de lodo

Un daño de incalculable magnitud que según datos recogidos sobre el terreno y emitidos por las principales organizaciónes tardará en revertir sus tóxicos efectos, en un plazo que se estima no será menor a los 100 años. Aunque hay  ambientalistas y ecologistas como Andre Ruschi que realiza su labor en la Estación Biológica de Marina Augusto que se ha pronunciado en términos más catastróficas afirmando que muchas zonas y sus ecosistemas son irrecuperables.


En definitiva un crimen ecologico producto de un exceso de almacenamiento que finalmente se desbordó en el momento en en  el momento en el que los operarios lo sometían a mantenimiento. Que tras ocho años desde que sucediera y se esclarecieran las causas, y ser encausados sus responsables, a los cuales simplemente se le fijo una sanción económica cuya cifra ascendió a la ridícula cifra de 250 millones de Reales brasileños.


Con Five Minutes, su autora pretende abordar la crisis que se está derivando del cambio climatico, desde una óptica social, destacando aquellos colectivos sociales que dependiendo de la latitud geográfica que se analice son los más afectados.


Deja tras de sí una estela de frustración e impotencia entre las cientos de miles de victimas cuyos principales representantes en el juicio sólo contaron en su conjunto con cinco minutos de tiempo para exponer en un alegato su tragedia tanto personal como colectiva. Fracción de tiempo que sin embargo fue suficiente sustancial para que la fotógrafa local de Rebeca Binda, armada con su equipo fotográfico se desplazará a los principales lugares donde dejó la riada fue más virulenta. Tanto en términos medioambientales como humanos y donde las huellas de la catástrofe han permanecido prácticamente intactas.

Para elaborar y ofrecernos un documento gráfico por momentos estremecedor de las graves secuelas que padecen los cientos de miles damnificados que son los testigos de las fracturas tan profundas que han dejado los sedimentos de hierro que han perforado la tierra, penetrando hasta el punto de dejarla impracticable para cualquier labor ya sea agrícola, forestal o ganadera.


Esterilidad cuya gravedad en términos generales se viste con su cara más cruda en términos de impacto ecologico, observando el avance inexorable de una desertificacion en un paisaje, que se muestra con su máxima crudeza en las proximidades de Paracatu de Baixo. Una de las áreas más afectadas por el desastre en las proximidades de la mina Samarco, tal es así que todavía se encuentran animales muertos tendidos al lado de los márgenes del rio.




Un ecocidio desolador por el que la fotógrafa pasó momentos realmente tristes, pues ella crecio en la capital del estado de Belo Horizonte, siendo uno de los destinos de ocio y esparcimiento para los residentes de la ciudad. Cruzado por miles de senderos que surcan los bosques. Y que ella recuerda acompañada de toda su familia especialmente sus abuelos con los que recuerda organizar excursiones por el valle del rio casi cada fin de semana.

Para Belinda la prioridad a la hora de recorrer las aldeas y retratar a las gentes que se vieron obligadas a emigrar a la ciudad, era establecer un vínculo con sus habitantes y los lugares. Los que durante generaciones han convivido en armonía con todo los demás seres vivos que ya prácticamente han desaparecido. Un mapa visual y emocional cuyo reportaje íntegro se publicó en el magazine de fotografía Lens Culture durante el último trimestre de 2021, y que podéis leer al completo aqui.



Choquequirao, el último refugio de la civilización Inca


Esixten lugares que por su singularidad poseen la dualidad de por una parte acaparar toda la atención, y por otra parte y debido a este exceso de atracción impedir que otros lugares de igual o más relevancia pasen desapercibidos. Ejemplos se podrían citar muchos, en muchos contextos y latitudes geograficas.


Uno de los más socorridos es el corredor formado por los macizos montañosos que componen los ocho miles que se suceden en la cordillera del Himalaya. Es raro que alguien pueda recordar algun pico más que el mítico Everest, cuya magnitud y literatura casi mitologica ha supuesto, que desplace a un segundo plano al resto de las no menos colosales cimas y que en el fondo la gran mayoría de ellas superan en dificultad la ascensión del gigante blanco.

Este agravio se repite en nuestro siguiente y definitivo destino, un área geográfica que abarca buena parte de los Andes Peruanos, y que por lo tanto comparte la característica de la altitud con las elevaciones del centro de Asia. Sin embargo el valle de Vilacabamba ubicado en el sureste del país aparte de albergar uno de los tesoros naturales más relevantes de Peru.

También presenta una condición análoga a la que hemos observado en los Himalaya, pero en este caso el matiz en la sobre-exposición se centra no en un accidente natural, sino en unos yacimientos arqueológicos construidos y habitados durante siglos por  la civilización precolombina de la comunidad Inca. En este caso todos (o casi todos), conocemos a alguien que emprendió la odisea de alcanzar y visitar los restos de la ciudad de Machu Pichu


Uno de los principales asentamientos habitados por los Incas, y que tras permanecer oculto a nuestros ojos. Fue finalmente descubierto y recuperado, convirtiéndose quizás en el principal enclave arqueológico por volumen de afluencia de publico en todo el continente americano. Honor que seguramente en no mucho tiempo tendrá que compartir con las nueve áreas arqueológicas que componen la ciudad de Choquequirao.


Enclave derramado sobre una loma situada que se sitúa a 154 kilómetros de Cuzco, más concretamente en las proximidades de la aldea de Abancay. El origen desde que suelen iniciar la visita aquellos "interprid@s" que desean acceder a un sitio que a día de hoy (y hasta que se inicien las obras por la que quedará unido a través de un teleferico que tendido sobre el valle de Apurimac le llevará a la localidad más próxima de y San Pedro de Cachora, que se encuentra a unos treinta kilómetros de las ruinas). Requiere algo más de planificación que lo que suele ser habitual cuando se programa una excursión a un sitio como este.

De hecho se recomienda invertir de dos a cuatro días en completar el trayecto que oficialmente tiene su inicio en un lugar conocido como Capurigo, un paraje dominado por el Nevado Salcantay. Cuya estampa parcialmente cubierta te acompañará a lo largo de los casi doce kilómetros que comprende el sendero que tras salvar un desnivel de casi mil metros finalizará cuando ante sus pies y veas las primeras terrazas de Choquequirao, o cuna de oro. 

Acceso a la plaza principal o Haucaypata donde se encontraba el área administrativa

En total la excursión serán dos días de intensa caminata por lo que será preciso hacer noche en un campamento refugio cuyo hospedaje está compuesto por una chozas y un servicio de restauracion. Por lo que cuando se arranca la caminata hacia Capurigo a eso de las seis de la madrugada se recomienda haber hecho acopio de fuerzas. En este podremos consultar un mapa que te ofrece diferentes sitios que te puedes a lo largo de la travesia.

Principalmente una sucesión de miradores como el de las Aves, el de la Bocamasa, o el de la Chiquisca, que se alternan con otros accidentes geográfica como playa Rosalinas una franja de tierra bañada por el río Apurinas donde se podrá hacer un alto en un trekking que por lo escarpado y sinuoso de su trazado es muy exigente hasta llegar a Rosa Alta y Marampata ante sala del centro arqueológico de Choquequirao.


Casi dos hectareas de superficie que equivale poco más o menos al treinta por ciento de todo el complejo, descubierto en el año de 1911 por Hiram Bingham. En total se compone de nueve sectores, entre los que destacan el centro político religioso, el sistema de fuentes y canales con acueductos, y el grupo de las portadas. 


Encontrada por casualidad por un explorador que se había propuesto descubrir definitivamente la ciudad de Eldorado. Choquequirao es un lugar de culto donde la aristocracia Inca se escondio de los conquistadores españoles, y que conserva entre sus piedras algunos de sus misterios.  


Sería conveniente apuntar al viajero que las connotaciones espirituales y carácter animista se perciben a cada paso que uno se adentra e investiga por los múltiples senderos. Donde la arquitectura vernácula ha sido construida a partir de encajar piedras talladas una encima de otra.


Lo primero que llama la atencion es la escasa altura de las viviendas de planta retangular de sus residentes, cuya distribuicion se establece alrededor de una explanada o plaza principal. Donde se observa algunos aperos de labranza que sus moradores empleaban en la actividad agrícola en la que eran extremadamente habilidosos. Los restos arqueológicos se distribuyen en la parte descendente del cerro Choquequirao y se agrupan a manera de pequeños barrios, un tanto separados de la zona ceremonial que se encuentra en la plaza principal rodeada por los edificios administrativos y comerciales.

Pues cabe recordar que lo que se presenta como un conjunto de construcciones parcialmente excavadas en la ladera de una ladera, protagonizó antes de que los colonizadores españoles la conquistarán, evangelizaran y finalmente exclavizaran a sus últimos clanes. Una intensa actividad comercial, esto debido a su ubicacion estratégica entre la metrópoli principal de Machu Pichu y la aldea de menor embergadura de Pisac, habiéndose encontrado numerosos restos en forma de objetos que fueron apresuradamente abandonados.

Fragmento de los murales de piedra con una porción de las 24 llamas representadas

La primera es de bajada hasta el río Apurina donde se hará escala en el campamento de Cocamasana  que con una altitud de poco mas 2700 metros será el punto más bajo hasta alcanzar los casi tres mil metros de altura, cuando por fin accedas a Marapanta donde se hará noche si has superado el mal de altura. Para atacar cuando la madrugada alumbra el día la última tramo en el que ya más sosegado puedes.

El círculo formado por los picos nevados Apus de Yanama, Ampay, Choquecarpu, Pumasillo y Panta, que se alzan en la vertiente del río Apurimac, en el distrito de Santa Teresa, provincia de La Convencion, en el Departamento del Cusco. Y con un poco de fortuna podrás observar alguna de las muchas especies que pueblan los alrededores. Que como no existe un inventario, no se sabe cuántas especies de plantas y animales existen en Choquequirao.


Aves majestuosas que surcan unos cielos limpios y que son el espacio aéreo del cóndor, el halcón, o el trogón (especie de apariencia tropical por lo que muchos la comparan con el Quetzal). Entre los mamíferos se han avistado felinos como el puma, cervidos como las tarucas, roedores como las vizcachas e incluso familias de osos que vagan por los bosques que flanquean los numerosos caminos que utilizan los nativos para transportar las toneladas de maíz y sus variedades.


El llamado a compartir en un futuro no muy lejano atractivo turístico con la capital Inca de Machu Pichu. La ciudadela de Choquequirao se muestra majestuosa e inexpugnable colgada entre nubes.    


Un cultivo ancestral que bien podría almacenarse en alguna de las despensas de la antigua ciudad, espacios angostos de los que sobresalen unas vigas por lo que se recomiendan tener precaucion. En el área Hanan o parte alta se ven huecos insertados en las paredes, que según los especialistas eran la última morada de las momias por lo que hacía la función de necropolis.

En muchos muros construidas a base de piedras oscuras en las que destacan el trazado de lanimales sagrados para los Incas como las serpientes a las que ellos denominaban como Amaru. Una representación en forma de zig zag que puede llegar a los veinte metros o más, compartiendo un espacio donde los acueductos dan cuenta del grado de desarrollo que habían alcanzado estos asentamientos de Incas, las teselas de llamas reproducidas a tamaño real sumando veiticuatro.




Creaciones abstractas que nos indican que aparte de ser un bastión militar que sirvió para protegerse de los tercios de tropas invasoras Españolas. Las cuales nunca llegaron a descubrirlos ni conquitarlos, y un lugar donde se observaban los astros. Habian tenido suficiente tiempo antes de sorpresivamente desaparecer de la region de desarrollar una expresión artistica a través de la que dejar constancia de su compromiso con el entorno natural el cual era venerado como algo casi sagrado.