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Plastic Free Hackney, el cambio climático como oportunidad para modificar habitos de consumo


Si coincidiendo con el inicio del nuevo milenio Londres adoptaba el termino de la City a través del que se simbolizaba la pujanza del nuevo neoliberalismo financiero, que convertía la ciudad en el nuevo bastión de la economía mundial. 

Y como eslogan de la post modernidad instaurando la multiculturalidad como definición de todo un nuevo ecosistema donde las relaciones sociales derribaban perjuicios raciales y sesgos de todo tipo. 

La primera generación nacida en la ciudad fruto de la digestión del empacho de la globalización, ha desarrollado un matabolismo compuesto por una diversidad de sensibilidades, cuyo principal desafió es el compromiso con su entorno y desde una óptica común.

De la posibildad de adaptarse a un escenario plagado de incertidumbres que nos esta dejando el cambio climático, y que nos obliga a movernos en una mayoría de ocasiones por la inercia que nos marca la intuición.



EL PLÁSTICO LA PUNTA DEL ICEBERG DE UN MUNDO INSOSTENIBLE 
 
Tratando de evitar en la medida de lo posible esta desorientación se pone en marcha durante la segunda década de este Siglo el colectivo Plastic Free Hackney, movimiento compuesto por un grupo heterogeneo de gente, que concienciados con los numerosos problemas.

Causantes del deterioro del medio-ambiente comienzan a organizar actividades donde la gente que participa tiene como principal objetivo, limpiar de residuos plásticos el Rió Lea, el principal afluente que pasa por el distrito londinense de Hackney, y cuyo cauce gracias a su labor.

No solamente ha recuperado su estado original y su equilibrio medio-ambiental, sino que además existen planes para que en aquellos tramos en los que sea posible vuelva a ser navegable, pudiendo de nuevo ver sus aguas cristalinas.

Como seguramente personalidades residentes en el barrio como el escritor Harold Printer Nobel de literatura o músicos como el mítico guitarrista Marc Bolan de la landa de Glam Rock T-Rex, nacidos en algunas de las muchas casas Eduardinas que debido al retorno del gusto por lo vintage.

Y por los amplios jardines con los que cuentan tanto de gestión publica como de titularidad privada, están siendo reformadas respetando las tipologías arquitectónicas originales y el entorno urbano donde se construyeron.



CONCIENCIACIÓN MEDIO-AMBIENTAL DENTRO DE LA CIUDAD

Devolviendo el esplendor a un barrio a partir de realizar actuaciones cuya labor colectiva, tiene como propósito transmitir el mensaje a la opinión publica en general, y a las nuevas generaciones en particular.

De que es vital apostar por una serie de medidas que aplicadas de forma transversal profundicen en la idea, de que por primera vez en la historia de nuestra civilización, debemos de tomar conciencia.

Del que el verdadero y único protagonista debe ser el planeta tierra y la increíble bio-doversidad que comparte con nosotros y el resto de seres vivos, y cuyo origen, desarrolo y evolución ha supuesto miles de años, una cantidad de tiempo inversamente proporcional al que ha invertido.

El ser humano en la practica aniquilación de los diferentes nichos ecologicos que conforman la bio-diversidad de nuestros paisajes, y cuyo rescate en la medida de lo posible comienza a partir de iniciativas como la que representa Plastic Free Hackney.

Que a pesar de haber sido creadas en entornos netamente urbanos por personas cuya relación con el medio natural ha sido en la mayoría de las ocasiones, muy puntual y casi siempre bajo parámetros donde la naturaleza se muestra de forma domesticada.

Si presentan un patrón sociológico caracterizado por una formación académica y cultural elevada, razones que facilitan su interacción y su implicación como activistas participando en diferentes causas tanto de ambito medio-ambiental como social. 
  
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El movimento Plastic Free Hackney realiza una labor de concienciacion global en términos medio-ambientales, actuando a nivel social en su entorno mas cercano desarrollando y fomentando practicas sostenibles.

Greenbelly, agricultura urbana vertical que genera nuevos espacios de actividad social y económica


Antes de comenzar la andadura de cualquier proyecto de cierta embergadura y que ademas implique destinar e invertir buena parte de tu tiempo y recursos materiales, es recomendable siempre que las circunstancias lo permitan realizar una prueba en un contexto y escala menor.

Que te permita valorar la viabilidad del proyecto que quieres emprender a partir de diferentes criterios estadísticos y económicos. Este es el caso de los fundadores de AVL Studio, que antes de embarcarse en el proyecto Greenbelly.

Por el que en principio se han propuesto como meta cultivar y vender productos ecológicos en el espacio urbano, tuvieron la oportunidad de comprobar la respuesta de los posibles consumidores a través de una versión instalada en la Universidad de Valencia, España un año antes.


CULTIVAR PRODUCTOS ECOLÓGICOS EN VERTICAL COMO DINAMIZADOR SOCIAL

 
La experiencia fue tan satisfactoria que los principales responsables del proyecto el arquitecto Alex Losada y Camille Lassale, decidieron materializarlo a una escala mayor, comenzando por una cita del filosofo Chino Lao-Tse que dice “Give a man a fish and you feed him for a day, teach a man how to fish and you feed him for a lifetime” (dale a un hombre pecado y lo alimentarás por un día, enseñale a pescar y lo alimentarás toda la vida.)

Que aplicándola en la practica se traduciría en disponer de los recursos suficientes a partir de los que conseguir cierto grado de autonomia alimentaria, en su caso se trata de desarrollar una granja urbana autosuficiente tanto energeticamente como en la obtención de productos y semillas de origen ecologico, a partir de los que cultivar y cosechar las hortalizas, frutas y verduras así como una variedad de especies.

Ademas de el compost que se obtendría a partir de reciclar los deshechos organicos, o el agua con el que se regarían los diferentes módulos obteniendose de la lluvia almacenada en los depósitos instalados en lo alto de la granja vertical.

La cual por su naturaleza polivalente, estaría compuesta por una estructura de andamios cuyas piezas se podrían ensamblar de forma sencilla pudiéndose trasladar a otro lugar del barrio, un diseño pop-up que garantiza otra de las metas que se ha propuesto el proyecto Greenbelly.


PRACTICAS ECOLÓGICAS  Y ARQUITECTURA MODULAR EN ESPACIOS EN DESUSO

Y que esta relacionado con el establecimiento de vinculos con los miembros de la comunidad en la que opera, a través de los que mejorar determinados habitos alimenticios e implicándoles en la producción de los ingredientes que componen su dieta. 

Un enfoque cuya meta requiere constancia porque los mecanismos relacionados con el consumo domestico están muy afianzados entre la población en general, que precisa que se garantice una oferta amplia y variada de productos a lo largo de todo el año.

Propósito que se se pretende conseguir a traves de la gestión de un espacio que en total suma 162 m2, los cuales se distribuirían en cinco alturas, alcanzando una producción anual de 6400 kilos de productos ecologicos, cifras estimadas que se podrían superar si la demanda se inincrementara.

Otro factor muy interesante a tener en cuenta y que a mi me ha llamado la atención, es como con un presupuesto limitado, que una primera fase precisaría de la asumible cifra de 12.500 Euros, (aunque lo idóneo seria alcanzar una meta fijada en los 45.000 Euros).

Financiancion para la que entre otras fuentes han recurrido a una campaña muy detallada y excelentemente presentada de crowfunding concertada con la plataforma kickstarter. Con la esperan cumplir con los plazos de inversión-retorno, que requiere un proyecto de estas características. 

Y es que hay que tener en cuenta que desde que seinicia la actividad hasta obtiener los primeros beneficios económicos existe un intervalo de tiempo, que puede oscilar entre la tres y los seis meses, lo que implica una serie de incertidumbres que hay que abordar planteando diferentes escenarios. Por lo que es recomendable aprovisionar lo suficiente en los margenes, tratando de lograr alcanzar un alto grado de compromiso entre todas las partes involucradas.
  
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Greenbelly es una granja urbana vertical que combina la arquitectura modular, las practicas ecologicas, ademas de la re-utilización de recursos y el aprovechamiento de espacios en desuso con el objetivo de ofrecer productos de temporada y calidad.