A vista de pájaro los patrones trazados por el tractor del ingeniero agrónomo Benedikt Groß, podrían interpretarte por cualquier lego en los avanzados métodos de agricultura informatizada, como una revisión de manifestaciones de la cultura universal como las lineas de Nazca en Perú.
Pero se trata de un innovador proyecto llamado Avena+ Test Bed, a partir del que se pretende explorar las posibilidades que ofrece la tecnología digitalizada, en la explotación de los recursos agrícolas y forestales, en este caso destinados a la producción de biomasa mediante la que generar energía.
El experimento aplica algoritmos de partición creando un modelo ambientalmente beneficioso para los campos de producción de biomasa mapeando las diferentes áreas en función de la calidad de sus suelos, obteniendo como resultado un índice estándar, mediante el que el agricultor puede consultar que parcelas son mas idóneas dependiendo del producto a cultivar.
Estableciendo previamente cual puede ser el impacto para la fauna y la flora de los hábitats sobre los que se interviene, evitando dañar la diversidad y de paso reducir las consecuencias negativas que suelen derivar del exceso que se suele de hacer de los monocultivos, agotando los recursos que ofrece la tierra y sus nutrientes orgánicos.
La primera cosecha destinada a la producción de biogas sera recolectada en el transcurso de la ultima de Julio. El artífice del proyecto que ha estado trabajando en el proyecto desde primeros de año, contando con la colaboración de RCA, en una región del sur de Alemania conocida como Unterwaldhausen.
Ha estado registrando datos vía GPS de una superficie total de 11.5, en la que se ha cosechado un 85% de avena y 15% de flores de diferentes especies. El objetivo general del proyecto es estudiar los posibles estos cambios especulando sobre los nuevos modelos que permitirán mejorar las prácticas agrícolas actuales, imaginando sus posibles implicaciones.
Ha estado registrando datos vía GPS de una superficie total de 11.5, en la que se ha cosechado un 85% de avena y 15% de flores de diferentes especies. El objetivo general del proyecto es estudiar los posibles estos cambios especulando sobre los nuevos modelos que permitirán mejorar las prácticas agrícolas actuales, imaginando sus posibles implicaciones.