Presentaron a finales de 2.015 los resultados de sus estudios, cuyos resultados podeis leer AQUI, en forma de una rosa bio-mecánica que emulando el ciclo natural por el que las plantas absorben CO2 produciendo oxigeno reduciendo los niveles de polución.
Aunque la función principal de los primeros prototipos están orientados a la producción de energía de origen renovable, el abanico de posibilidades es amplio y alentador según el principal responsable del estudio Ove Nilsson, que lleva buena parte de su carrera estudiando los mecanismos involucrados en la vasculación de las rosas.
Con el objetivo de desarrollar dispositivos sostenible que aprovechen las características morfologicas de las plantas orgánicas. Los prototipos híbridos creados hasta ahora son capaces de crecer en entornos naturales cumpliendo funciones artificiales de forma autónoma
Y en como completan este proceso a nivel ionico y metabolico realizado a través del extenso cableado que cubre la totalidad de la planta oxidando los nutrientes de los que dispone para su desarrollo. Y que podria conducir al desarrollo de un arsenal de plantas compuestas por circuitos electrónicos, cuya aplicación en diferentes sectores supondría reducir la depedencia de los combustibles fosiles.
RELACIONADO: Eccerobot, un robot casi humano