Situada en la localidad catalana de Vallirana a escasos kilómetros de Barcelona, la Cova Bonica a la que se accede por un sendero que mientras desciende ofrece al visitante un muestrario único de la flora de la zona.
Han revelado un dato esclarecedor la relación de estos primeros pobladores que se dedicaban a la recolección de frutos y a la caza como medio de subsistencia, con los primeros asentamientos donde se practicaba la agricultura. Y que sirve para describir el proceso por el que el ser humano paso de llevar una vida nomada a constituir los primeros asentamientos hace 8.000 años.
Parajes naturales que en la actualidad se han convertido en rutas que cada fin de semana visitan miles de excursiones que a pie o en bicicleta, conviven con el entorno natural y sus elementos naturales. Como esta gruta que parcialmente ocultada durante miles de años ha pasado a convertirse en un lugar de destino donde finalizan ciclo turistas una de las mas osadas trayectos que se pueden realizar en la comarca.
Teniendo como inicio la propia pedania de Villarina y con una distancia que se divide en diferentes secciones, pasando del piso firme de la carretera a zonas configuradas por senderos y vaguadas hasta completar un trayecto. Cuya señalización guiara a los ciclistas hasta la entrada de la cueva, de la que por razones de seguridad se puede visitar su entrada, un espacio donde la conservación y la actividad cientifica se funden en un habitat que todavia tiene muchos secretos por descubrir.
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Visitable durante buena parte del año la Cova Bonica donde aparte de la actividad científica que se realiza en su yacimiento arqueologico, permite la organización de actividades como visitas o la espeleología que revalorizan la zona.