La naturaleza ofrece extraordinarios ejemplos de especies y su asombrosa capacidad de adaptación al medio, aun en las condiciones mas adversas sobreviven convirtiéndose en algunos casos en seña de identidad del paisaje del que forma parte.
Esculpidos por el viento
Debido a la exposición de los intensos vientos que tras recorrer 2.000 kilómetros provenientes del circulo polar antártico, y superar los escarpados acantilados que forman la franja costera que dilimita la región de Slope Point. Penetran en el interior de la isla golpeando sobre las agrupaciones de arboles que se mecen adoptando curiosas formas.
Estas esculturas orgánicas que se han formado a lo largo de cientos de años como consecuencia de la presión que ejercen las rachas de viento. Que llegan alcanzar una velocidad de mas de doscientos kilómetros, razón por la que la zona se encuentra practicamente inhabitado.
A medida que crecen los árboles son esculpidos constantemente por el viento que viene del Océano Austral. Orientando sus ramas se en dirección norte, con el fin de ofrecer la menor resistencia al vientos.
A medida que crecen los árboles son esculpidos constantemente por el viento que viene del Océano Austral. Orientando sus ramas se en dirección norte, con el fin de ofrecer la menor resistencia al vientos.
Vientos del sur
Slope Point situado en el sur de Nueva Zelanda es una franja de tierra compuesta por pastos donde pacen algunos rebaños diseminados y cuya población mas cercana se encuentra a una distancia de setenta kilómetros. Su aislamiento y riqueza paisajista la han convertido en destino para excursionistas y amantes de la naturaleza.
Que atraídos por su riqueza natural y por las singularidades de su ecosistema, recorren sus llanuras descubriendo nuevos asentamientos Donde contemplar ejemplares de arboles centenarios que se apelmazan unos contra otros creando un parapeto natural, con el que protegerse de la furia de Eolo.