Nomada Q : atracciones

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Abierto desde el 4 de Julio los amantes de los deportes extremos y las emociones fuerte, tienen a su disposición un desafió nunca visto hasta ahora. Acostumbrados como estamos a practicar actividades urbanas en exteriores, Bounce Below nos reta a que nos adentremos en las profundidades de la tierra.

Donde podremos vivir una experiencia que combina los mas audaces saltos en red con el contacto con la naturaleza que puebla el interior de las cuevas. Desarrollado por la compañía de entretenimiento y aventura Zip World. La gruta sobre la que se han tendido las camas elásticas.

Es una vieja mina de pizarra ubicada en gales del norte, BB cuenta con tres trampolines cada uno diseñado en función de unas características especificas que entrañan un grado de dificultad diferente. A la plataforma que se accede tras realizar un breve pero intenso viaje en tren, muestra en su recorrido parte de la historia del yacimiento y de la especies que lo habitan.

Con una profundidad de sesenta metros la cueva ha sido acondicionada con un sistema de seguridad adaptado a sus características. Para lo que previamente se ha realizado un estudio que ha tenido en cuenta de las características geológicas de la roca, donde se iban a fijar los cabos y su grado de resistencia.

Ideada para que en principio todo tipo de publico pueda participar disfrutando de una hora de saltos ampliable si así lo desea el cliente. Este laberinto subterráneo conectan los trampolines y toboganes completada con una escalera en espiral que comunica los tres niveles. En una atracción única en el mundo donde lo puramente lúdico se enriquece con un entorno donde lo natural y unas trazas de misterio suponen alicientes irresistibles para cualquier aventurero.

Inspiradas en las atracciones mecánicas que te puedes encontrar en cualquier feria, que a cambio de unas monedas nos trasladan a otros mundos lleno de emociones y adrenalina.

Un emprendedor que responde al nombre de Bruno inicio en 1.969 su propia aventura, un proyecto mediante el que cultivaba dos facetas en su vida o dos pasiones según se mire.

Una la restauración de muebles antiguos y la otra la de construir todo tipo de artilugios en el taller que ha montado contiguo al restaurante. Provisto de unos embutidos y unos caldos producidos a partir de las uvas cultivadas en viñas de la región donde se localiza la pedania de Battaglia en Italia.

Bruno escogió un árbol situado en un acceso al bosque en las afuera de la localidad y decidió montar un tenderete donde ofrecía sus productos a los turistas. Este chamizo bautizado como Ai Pioppi.

Con el tiempo se convirtió en un merendero donde Bruno y familia ofrecían comidas a los vecinos. Debido a la gran afluencia de publico Bruno decidió diseñar un proyecto más ambicioso y poner en marcha su Graceland particular.

Lo que comenzo siendo un modesto tío-vivo, atracción de divertimiento dirigido a los niños. Se ha convertido cuarenta y cuatro años después en poco mas o menos que un parque temático. Que por si solo, casi atrae mas visitantes que clientes al salón comedor de su restaurante.

Fabricadas su mayoría en sus ratos libres, todas y cada una de las atracciones han sido realizadas empleando materiales de reciclaje. Objetos como muebles o electrodomesticos, que tras ser desmontados y clasificadas sus piezas.

Se restauran convirtiendo en las piezas de engranaje de un mecano que representan la vida de este peculiar Da Vinci. Montañas rusas, tirolinas, aparatos cinéticos y toda una serie de artilugios y prototipos conviven con su entorno natural.

En donde destacan numerosas especies de arboles que en su conjunto forman unas de las áreas ecológicas con mas diversidad del país trasalpino. Suponiendo una experiencia en donde se combina el ocio y la naturaleza.

Construido en plena época de expansion del régimen socialista en la antigua RDA, el parque de atracciones Spreepark Plänterwald cuyas instalaciones situadas en el este de Berlin. Entrando en funcionamiento en 1.969.

Presentado por las autoridades de la antigua administración como alternativa a las propuestas de ocio, que se iban introduciendo de forma clandestina pese a la censura ejercido. El conjunto de sus atracciones estuvieron activaron hasta 1.989, cuando finalmente se trataron de subastar con escaso exito.

Siendo adquiridas finalmente sus poco más de 29 hectáreas y media de superficie por una compañía inexperta. Que tras explotarlo hasta 2.001 se declaro en quiebra debido a su incapacidad para hacer una lectura correcta y sacarle rendimiento.

Por lo que un periodo de explotación se vio obligada a cerrarlo. Entrando en un periodo de desuso por lo que permanecio abandonado mas de una década. Hasta el año 2.012 que fruto de la iniciativa artística ciudadana el decadente parque se rebautiza con el nombre KulturePark.

Y deciden poner en marcha un proyecto que a partir de la realización de intervenciones especificas. Pretendía explorar las posibilidades de recuperación de los diferentes elementos que lo conformaban a través del arte.

Promovido por un colectivo de artistas entre los que destaca los artistas locales George Scheer y Stephanie Sherman. La artista argentina Agustina Woodgate y el comisario Anthony Spinello.

Desde que se iniciaron actividades a lo largo de 2.012 en Kulturepark han organizado cada temporada un calendario regular de propuestas. La mayor parte de ellas enfocadas a la restauración de una atracciones que en muchos casos se encontraban en un avance estado deterioro.

Aparte se organizan cursillos, representaciones teatrales, exposiciones, charlas y actividades dirigidas a un publico infantil y juvenil, y que tienen como objeto concienciar a sus participantes. Sobre la importancia de reutilizar espacios publico abandonados en beneficio de la comunidad y de los vecinos que residen en su entorno.