Cuando los grandes maestros de la pintura universal en sus diferentes estilos crearon sus grandes obras. No existía la tecnología por la que dotarlas de una acción continuada.
Lenguajes narrativos como el cine que artistas como Botticelli, Rubens, Vermeer o Caravaggio les hubiera gustado tener oportunidad de emplear para poder precisar mas si cabe, el mensaje que pretendían transmitir con la exposición de su obra.
El artista Rino Stefano Tagliafierro, aplicando metodologías digitales ha seleccionado una serie de obras clásicas que por sus caracteristicas narrativas y fuerza visual ofrecían un rendimiento óptimo. Adaptandose a los requisitos de la aplicación de un sencillo efecto de fading entre dos imágenes, con el que acababa obteniendo un archivo en formato gif.
El experimento que ha bautizado como Beauty. Nos ofrece una perspectiva actualizada y dotada de continuidad en la acción, obteniendo como resultado creativo una obra cuya narrativa dota de movimiento y acción a unas obras de corte clasico.
Que de haber sido realizado en otro contexto histórico o aplicando otras ténicas de expresión artística. El resultado son fragmentos de películas animadas que desbordan la imaginación del quien las contempla.