Las vacaciones se suele convertir en el periodo de tiempo mas esperado por la mayoría de los trabajamos a lo largo de un duro año de trabajo. Por lo que los viajes se planifican al detalle disponiendo de multitud de opciones.
Cada una adaptada a los gustos y perfil del viajero que anhela su inicio para poder desconectarse de su rutina habitual. Aunque en ocasiones se dan excepciones que convierten esos días de asueto en una aventura y en la antesala de un proyecto laboral que transforma la vida de profesional de sus protagonistas.
Nick Olson fotógrafo y su pareja Lilah Horwitz diseñadora de profesión se embarcaron en el verano de 2.012 en una odisea que a porteriori se integraría complementando su plan de negocio, convirtiéndose en su proyecto de vida, además de un compromiso con su entorno.
Establecidos en New York donde regentan un negocio pop-up donde ofrecen sus diseños artesanales a un publico de lo mas variopinto, decidieron emprender un viaje en donde aplicando sus conocimientos construirían una vivienda con materiales reciclados donde poder vivir una experiencia inolvidable.
A TRAVÉS DE LA VENTANAS VIVES EL BOSQUE
Cuando tras un largo viaje de cientos de kilómetros en su destartalado vehículo llegaron a un bosque situado en las montañas occidentales en el estado de Virginia. Un lugar que debido a sus extraordinarios paisajes, dejaron extasiados a estos dos intrépidos viajeros. Que no dudaron por un segundo establecerse en mitad de la naturaleza.
Entre otras muchas razones estuvo la de que no había nada mejor que al levantarse por la mañana y sentir el rocío de la mañana, al calor de un humeante café, por lo que decidieron pasar el resto de sus vacaciones en un claro del bosque. Donde contruyeron una cabaña empleando las ventanas que por casualidad se encontraron en su trayecto, a las que posteriormente añadieron el mobiliario necesario con el que crearon un lugar acogedor donde vivir en contacto con la naturaleza y poder trabajar evitando el estres de la gran manzana.
Aunque no se trata de una residencia fija, la casa de las ventanas en la que pasan largas temporadas si ha ido adquiriendo las condiciones necesarias que garantizan su habitabilidad. Atraídos por su historia los creadores audivisuales Matt Glass y Jordania Wayne se trasladaron con su equipo de grabación de su estudio Half Cut Tea, conviviendo y filmando la pieza junto a la pareja, documento donde Olson y Lilah relatan en clave de testimonio las razones que propiciaron el diseño de las casas de las ventanas y de como su presencia ha contribuido de forma sustancial en su faceta profesional.