Lo que ayer representaba el futuro hoy en día ya es una realidad, los recursos hidricos se han convertido en un valor que cotiza en bolsa, mientras tanto el nivel de los océanos esta aumentando como consecuencia del cambio climático. Mientras tanto el colectivo StudioMobile mediante la instalación titulada Networking Nature, nos muestra como utilizando unas cuantas sondas para formar una red, por la que canalizar agua desalada, la humanidad se podría adaptar a este escenario adverso.
Creada con motivo de la ultima edición de la Bienal de Venecia, Studiomobile explora un escenario futuro donde la humanidad se vera obligada a vivir en un insólito paisaje modelado por los cambios ambientales, un enfoque caracterizado por abrazar las condiciones cambiantes y aprovechar las oportunidades resultantes. Con frecuencia, los cambios percibidos como negativos abren nuevas posibilidades y oportunidades innovadoras.
Nos imaginamos nuevas comunidades basadas en el movimiento, que viven en estructuras flexibles, auto-suficientes, y nómadas. Creemos que el agua del mar está a punto de convertirse pronto en un recurso clave para el desarrollo de comunidades urbanas.
Dentro de un tanque de cristal lleno de agua salada, algunos destiladores solares extraen agua dulce mediante el calor producido por pequeñas lámparas. El agua de mar se evapora y el vapor se condensa en agua dulce, que se recoge en tanques suministrándose. En una red de agua inteligente controlada por sensores que leen la falta de agua, activando las bombas que proporcionan el agua donde hay un pico de demanda.
Networking Nature que estará en exhibición hasta el 25 de Noviembre en el Palazzo Bembo, sugiere un futuro imaginario en el que es imposible ver la línea divisoria entre la arquitectura y el medio natural, entre máquinas y organismos vivos artificiales.
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