El artista Marco Zamora continúa con su uso de una paleta simple donde predomina el blanco y negro, mediante los que nos muestra el paisaje urbano, y los acontecimientos cotidianos que a menudo nos pasan desapercibidos. Los tabajos de Marco incluyen una inmensa cantidad de detalles que poco a poco se revelan a los ojos del espectador que prende su curiosidad en saber como se desarrolla la historia que nos cuenta y en la que de alguna forma acaba participando en su contexto acentuado por lo monocromático. El uso esporádico de la artista de color sirve como una guía para captar la atención del espectador en un contexto urbano de otra manera familiar.
Se trata de pinturas sobre el tiempo presente. Ellos no son sólo un lugar no especificado, representan lo que está sucediendo ahora. Siento que estamos en un estado transitorio que siempre hemos sido y lo será. Nuestra dinámica social siempre necesita más, siempre en movimiento, siempre en tensión. Es nuestra naturaleza. Últimamente, el artista ha estado pintando las personas sin hogar y indigentes de la calle, porque es real. Refleja el AHORA. Estas imágenes son experiencias reales que ha ido registrándola y recombinación con las pinturas.