La perla del Ulster una ciudad construida sobre una isla
Conocida como la perla del Ulster, es un claro ejemplo de como sus habitantes han logrado adaptarse a un medio hostil venciendo su aislamiento pero no por eso dejando de conservar sus señas de identidad, algo que el turista puede constatar nada mas desviarse de la autovía principal que desde Belfast le conducirá tras completar una distancia de alrededor de 140 kilómetros a sus inmediaciones.
Pudiendo escoger entre seguir todo recto hasta el centro de la ciudad y dejarse maravillar por un urbanismo que a pesar de no ofrecer monumentos reseñables salvo el castillo medieval que da nombre a la misma y es sede del museo de la ciudad. Si conserva buena parte de su entramado original.
O desviarse y perderse por una red viaria de carreteras secundarias que entre prados y bosques surcados por pequeños riachuelos le permitirá degustar el sabor de la autentica Guinnes Irlandesa que elaborada de forma artesanal todavía se puede apreciar en decenas de pequeñas explotaciones, donde como antaño aplican las tecnicas tradicionales para producir sus genuinas cervezas.
Se tratan de destilerías de carácter familiar que a lo largo de la ultima década se han recuperado convirtiendo en una de las denominaciones de origen de esta región a cuyo reclamo acude cada vez mas turistas y que se completa con una carta gastronómica caracterizada por un fuerte acento Británico.
Donde el escalope, el puré de coliflor, la variada muestra de hongos recogidos en los alrededores, la excelente calidad de sus mantequillas, además de su archiconocido roast beef o postres de chocolate brownie son las autenticas protagonistas.
Once kilómetros de cuevas de mármol
Las cuevas de Marble Arch Caves situadas dentro del termino municipal de Florencecourt siendo el segundo conjunto espeolologico mas largo del Reino Unido con mas de 11,5 kilometros de galerias cuya formación es producto de la erosión producida por la presencia de numerosos ríos subterráneos que hay en la zona principalmente el Cladagh y que a lo largo de millones de años han tallado sus cavidades. Parcialmente abiertas al publico desde 1.982 para su descubrimiento oficial sin embargo hay que remontarse hasta el Siglo XVIII.
Aunque la oferta hostelera a disposición del viajero aumentado considerablemente en los últimos años compuesto por una variada red de casas rurales además de una amplia oferta de camping, y aunque pille un poco retirado de la ruta principal nosotros te recomendamos Finn Lough Resort.
Un conjunto de domes que presentan diferentes tipologías en función de la cantidad de plazas que se reserven. Enclavado en un entorno natural privilegiado rodeado por bosques y ríos que debido a las características de aguas bravas permite practicar deportes de aventura como el Rafting o descenso de cañones.
Deporte, naruraleza y aventura entre burbujas geodésicas
Situado a escasos kilómetros de la capital desde que abrieron su puertas han contado con varias ampliaciones tanto de lugares de hospedaje como en la oferta de actividades y excursiones que el cliente tiene a su disposición. Incluyendo guías que nos mostraran además de las clásicas postales bucólicas Irlandesas dominadas por la bruma y la humedad que todos conocemos, nos narraran las leyendas del bosque y de los pobladores que lo habitan y lo protegen desde hace cientos de años.
Enclavado en un lugar conocido como Storm Desmond los huéspedes de estos singulares domes en forma de burbuja diseñados por estudio Onion ofrece una panorámica total de su entorno gracias a las lunas esféricas con las que están construidas permitiendo una relación prácticamente inmersiva con el paisaje donde se integran. Y desde cuyas cúpulas el cliente ademas puede ver los senderos perfectamente señalizados del reciente circuito para bicis de montaña que se ha trazado entre los arboles del Muckross forest.
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Irlanda del Norte es un gran desconocido en su mayor parte cuyos encantos no suelen formar parte de los itinerarios que se pueden contratar en las agencias de viajes, pero que sin embargo merecen ser visitados. Naturaleza, tradición e historia se funden con un diseño sostenible y una arquitectura atemporal que se nutre de los ecosistemas que conforman su entorno natural.
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