Hasta la ciudad de Riga capital de Letonia también ha llegado las consecuencias en forma de polucion atmosférica provocada por el trafico de vehículos privados. Entre otras causas debido al aumento de ventas de utilitarios y de las nulas políticas con las que diversificar los modelos de movilidad.
En una ciudad que ha modificado muy poco su patrón urbanístico en el último medio siglo, por lo que el impacto que ha supuesto la presencia y aumento del uso del coche sobre el conjunto de la ciudad y concretamente en el casco histórico. En el que la saturación ha llegado a cotas dramáticas impidiendo la movilidad del conjunto de peatones.
Efecto que ha repercutido muy negativamente en la actividad económica de la zona. Observandose un aumento de los índices de contaminación y por los tanto de las afecciones cardiorespiratorias saturando la red compuesta por los servicios de atención sanitarios.
Situación que pese agravarse en los últimos años no ha provocado ningún tipo de reacción o alarma entre las autoridades, cuyas acciones políticas brillan por su ausencia en este sentido. Inhibicion institucional que sin embargo, ha servido para que diferentes colectivos civiles denuncien esta situación ya insostenible.
Organizándose, diseñando y proponiendo una serie de actividades cuyo objetivo es concienciar a la ciudadanía sobre los beneficios de utilizar otros medios de movilidad en el espacio publico. Que contribuyan ha mejorar el modelo de movilidad actual, y por lo tanto reducir los índices de contaminación y mejorar sustancialmente los índices que obedecen a la economía real.
Realizados con bambú los armazones desprovistos del chasis sirven para evidenciar el consumo de espacio, que supone la presencia de vehículos privados en el espacio publico.
En detrimento de alternativas que apuesten por el transporte colectivo que incidan sobre un modelo de ciudad más sano y limpio. Portados por los activistas del colectivo local Let’s Bike it que los conducen dando pedaladas en el interior de los esqueletos de bambú que representan los coches, se incorporan a las vías de acceso como un usuario mas. Dejando patente visualmente el exceso de espacio que supone la utilización incontrolada del vehículo en ciudades que carecen de las infraestructuras necesarias.