Alan Becker - Animator vs. Animation, la rebelión de la máquina comienza en el escritorio de tu ordenador

Con más de 9000000 millones de seguidores en su canal de Youtube que recomiendo que visitéis encarecidamente AQUI, masa social que le ha convertido en todo un influencer y referente en el ámbito de la animación.

Principalmente por un conjunto de tecnicas con las que ha revolucionado la narrativa a la hora de plasmas en dibujos e ilustraciones, unas historias que destacan por su ingenio e imaginacion, además de un sentido de humor inherente y muy paticular.

Utilizando un lenguaje ágil inspirado en los humoristas clásicos del cine mudo, en su último trabajo titulado Animator vs. Animation, el cual podéis ver íntegramente desde AQUI. Se plantea el eterno dilema humano contra maquina. En este caso su autor el animador y creativo Alan Becker recurre a sus mejores y más creativos efectos visuales y discursivos para describir esta disyuntiva.

Y ponernos en contexto sobre lo que para es su interpretación de este viejo axioma acerca del que se debate desde tiempos inmemoriales, provocandonos como individuos preocupación e inquietud.acerca de cuáles son los límites y márgenes entre lo orgánico y lo artificial. En una era, la digital, en cuya narrativa biotecnología ya se están incorporando las primeras herramientas basadas en lo que se conoce como inteligencia artificial. Antesala de lo que será el siguiente paso, la comunicación basada en flujos de información cuantica.

Conducido por un personaje principal llamado El Elegido, que está atrapado dentro del explorador de Internet realizando trabajos forzados como bloqueador de ventanas emergentes. Se trata de la primera de una saga generada por ordenador y creada en el programa Adobe Flash que cuenta con millones de fans en todo el mundo.

Utilizando como escenario donde se desarrolla la historia la pantalla de un ordenador y el escritorio de la aplicación de diseño, los personajes que dibuja Alan con su bolígrafo óptico cobran vida ejucatando las acciones para los que son programados. Hasta que en un momento determinado de las operaciones deciden tomar el control imponiendo su autonomía y voluntad sobre su creador, que desconcertado se ve obligado a tomar una decisión drástica ¿apretar la tecla de retroceso o no?. Para volver a recuperar el control de las decisiones sobre ellos.