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Taiwan es un país que se caracteriza por sus paisajes casi salvajes, donde se alternan los montes verdes con las planicies dominadas por arrozales y enormes extensiones de terreno dedicadas al cultivo del te.
Como parte del nuevo plan urbanístico en la localidad de Hualien, por la que se pretende transformar una antigua zona industrial que operaba a lo largo del rió que cruza la ciudad contaminando su cauce. Construyendo una urbanización que actué sobre el territorio imitando las peculiaridades naturales de su entorno.
Diseñado por el estudio de arquitectura Bjarke Ingels Group, el conjunto residencial cuyo perfil recorta el perfil del horizonte imitando la cordillera que se dibuja en segundo plano. Los edificios que componen Hualien residences se proyectan sobre su entorno, obedeciendo a los elementos que lo definen.
El trazado en zig-zag de las cubiertas se convierte en un jardín natural debido a que están concebidos como muros vegetales, que actúan como climatizador natural regulando la temperatura en el interior de los apartamentos y favoreciendo la creación de un ambiente sano donde la circulación de aire es constante.
Sus estructuras cuyo diseño se inspiran en los cultivos de arroz que distribuidos de forma escalonada como terrazas sobre el terreno se derraman hasta cerrar el plano. Convirtiendose en auténticos tragaluces de luz natural, a la vez que se reflejan replicando en sus ventanas el paraje natural.
El desarrollo de Hualien es una empresa utópica que busca la intersección perfecta entre la naturaleza y el entorno construido. La forma del edificio cambia dependiendo de la perspectiva, los edificios son un reflejo completo de lo natural. El complejo está situado en un lugar prominente frente a la costa y cerca de los deltas del río Hualien y del río Papaya, rodeado por la columna vertebral de montañas de Taiwán al oeste, el océano al este y la ciudad de Hualien al norte.
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