Adosado a la estructura de un puente por el que circula trafico ferroviario desde hace mas de cien años en la periferia, el edificio Archway Studios, es un ejemplo de como optimizar el espacio en el espacio publico tranformando el paisaje urbano.
Firmado por Undercurrent Architects, se trata de una construcción modular en la que se ha empleado acero en bruto, consiguiendo mimetizar estéticamente la fachada del edificio en el entorno.
Debido a las características de la zona donde esta ubicado, su diseño curvo y al estar adherido por un lateral al muro del ferrocarril, las posibilidades de iluminar el interior de las estancias eran muy limitadas, aplicando una solución en vertical, convirtiendo la cubierta del inmueble en una enorme claraboya.
Este ojo de luz inunda la totalidad del espacio con luz natural, no precisando de la instalación de iluminación artificial. Dividido en tres alturas su diseño se inspira en las antiguas casas que albergaban a la clase obrera que trabajaba en la industria. Otro aspecto a destacar ha sido la especial atención a la insonorización y control de la vibración, una base de goma permite que la estructura actua con independencia de las superficies circundantes, amortiguando la contaminación acústica producida en la zona.
Archway Studios ocupa parte de un viaducto ferroviario; un taller abovedado conectado a un atrio con nichos residenciales. El diseño funciona con el contraste entre las cualidades comprimidas y cavernosas del arco y los espacios esbeltos y eclesiásticos del atrio.
La pared externa está compuesta de una serie de hojas que sistemáticamente reducen el ruido y la resonancia estructural mientras que proporciona comodidad interna. la capa más externa de seis milímetros está soportado por costillas revestidas de acero y rellenas con aislamiento acústico de fibra de estera. siendo estructuralmente independiente de la construcción de la pared interior.