Lo que distingue a Pete Turner en el mundo de la fotografía es que está constantemente innovando. En 1956, se graduó en el Instituto Rochester de Tecnología, como parte de la primera promoción en recibir una licenciatura en Bellas Artes dedicada a la fotografía. Ayudó a diseñar portadas de discos fuera de los retratos tradicionales en el reino de las imágenes conceptuales. Él experimentó con el color en los años 50, una época en que sólo se usaba el blanco y negro.
Turner, cuyo nombre es sinónimo de fotografía en color, tiene una larga y distinguida carrera como creador de imágenes para fines comerciales, editoriales y artísticos, entre ellos decenas de portadas de discos. Su libro, El color del Jazz (Rizzoli, 2006), es una colección de fotografías que aparecieron en los álbumes de jazz de los años 50, 60 y 70. Su arte de tapa fue audaz y atrevido, con interpretación literal en lugar de imágenes en un momento en el que la mayoría de las portadas sólo retratos de los músicos.
Su ilustre carrera está llena de innovaciones. Turner ha abrazado el cambio a lo largo de su vida, y la constante innovación le ha permitido producir trabajo que es visionario y muy identificable. Las fotografías de Turner cuelgan en numerosos museos de todo el mundo, entre ellas la Maison Européenne de la Photographie de París, el Tokio Metropolitan Museum of Photography y el International Center of Photography de Nueva York. Él ha hecho un montón de trabajo comercial, publicando su trabajo en revistas como Esquire y Sports Illustrated.