El regalo de Gabriel, es una de esas lecturas que vas relegando en el tiempo, no porque albergues dudas sobre su calidad literaria, o porque siempre tengas una alternativa seleccionada mas atractiva, o porque pese a que cuenta una historia previsible (no por ello convencional) te vaya a resultar pesada de digerir. No es porque en mi caso sabia que el libro del escritor y cineasta británico Hanif Kureishi de origen paquistani, contenía los suficientes elementos narrativos con los que identificarme, como para que en cualquier momento me zambullera entre sus paginas.
Y he de confesar que esa espera consentida ha merecido la espera, que su combinacion de situaciones realistas con otros fenómenos que entran dentro del terreno de lo paranormal me han sugerido muchas y diferentes emociones en los diferentes momentos que lo he leído, y que pese a que la trama tragicomica que plantea la novela a lo largo de las pocas mas de doscientas paginas de la edición de Anagrama, acabe con un final precipitado edulcorado mas propio de un telefilm de sobremesa que de un libro que pretende a reflejar las relaciones de unos personajes que renuncian a sus sueños y su forma de vida modelada e idealizada durante su juventud, por las presiones que ejerce la sociedad aburguesada de la que forman parte y a cuyos previligios tampoco quieren renunciar.
Escrita en primera persona, Gabriel es un adolescente que se comunica con su hermano gemelo fallecido da años antes, mientras tanto asiste como mero espectador a la descomposición de su entorno mas cercano, representado por sus padres que están momentaneamente separados. Su padre músico de vocación tuvo su pequeño momento gloria formando de un grupo de rock, después de una biografía de avatares, malvive en una pensión esperando a que le llamen de una oficina de management que le proporcione un contrato para formar parte de las grandes giras, su madre es una ama de casa con escasa formacion que trabaja de camarera que trata de aplicar el sentido común a sus vidas, pero la realidad que impone la soledad. Grabriel que vive con su madre tiene encuentros periódicos con su padre con el que comparte la desdicha de este, en una de esas visitas tiene la oportunidad de conocer a uno de los músicos con lo que tocaba su padre en su juventud, un músico de éxito que le hace un regalo a Gabriel, se trata de un dibujo de su autoría, que enseguida se convertirá en objeto de codicia por parte de sus padres, que condicionados por su delicada situacion economica, trataran hacerse con el.