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Uno Tomoaki, tratando el espacio arquitectonico como un paisaje de emociones y momentos

 

Una de las tendencias más en boga en la arquitectura actual y que se contempla como un fenómeno tan vanguardista como sofisticado es lo que se conoce popularmente como construcción modular. Una praxis dentro del diseño arquitectónico que es heredero de movimientos como el de la Bauhaus.


Y que en términos prácticos prioriza la funcionalidad y la adaptación del espacio edificado desde una óptica que báscula entre dos ejes. Por un lado busca la polivalencia en la distribución  de espacios, y en un segundo término su uso y por su puesto su habitabilidad.


Arquitectura modular que en definitiva se suele contemplar como una propuesta tan novedosa como sugerente, cuyos elementos constructivos se fabrican en serie y atendiendo a las formas más minimalistas. Adoptando un modelo de elaboración en el que los materiales empleados suelen definirse por su bajo impacto medio-ambiental.


Pero que como una mayoría de supuestas propuestas súper vanguardistas, suele ser a poco que investigues el producto descafeinado de una batería de antecedentes. Que más o próximos en el tiempo representan una muestra que incluso cuestionan los supuestos valores y principios sobre de forma a veces excesivamente academica.


Sobre los que asienta un presunto y novedoso modelo de construcción cuyos mecanismos abordan una determinada problemática urbanistica en relación a una diversidad de parametros. Como pueden la excesiva dermografía en un determinado lugar, o el reducido impacto medio-ambiental que supondría adoptar un patrón construcción basado en soluciones modulares. 

 

Uno de estos primeros antecedentes hay que buscarlo en una cultura tan milenaria como a veces desconocida como la japonesa, que aunque han incorporado una mayoría de los estándares constructivos occidentales a su práctica durante la segunda mitad del Siglo XX. Si han conseguido que al menos que algunos de aquellos métodos de construcción de caracter tan artesanal como ancestral.

Interior de la casa Ogimachi en la que la simetría de sus espacios y la luz se inspiran en su función 

Hayan llegado hasta nuestros dias perdurando en el tiempo pese a la inmensa presión que puedan recibir. Praxis arquitectonicas que aunque de forma esporádica nos revelan una forma de contemplar la vida y el paso del tiempo, que va mucho más allá de tratar de transmitir unos conocimientos técnicos relacionados con el diseño y ejecución sobre el terrenos de edificios.


Hecho que puede resultar más o menos gratificamente desde el punto de vista estético e intelectual, pero que tiene que ver además con unos valores socio-culturales. Que muy arraigados todavía en determinadas comunidades que se encuentran en regiones del interior del país del Sol naciente, nos traslada una forma de percibir la realidad propia.


Y que tiene que ver básicamente con un hecho definido por la coherencia con nuestra propia naturaleza como seres vivos. Y es que cada etapa de nuestras existencias reúne unas circunstancias concretas, lo que significa que precisa de la aplicación de unos plazos que no excedan las capacidades de ese individuo en ese momento determinado.


La arquitectura de Uno Tomoaki se diseña en las antípodas de la practica Neo-Darwinista que impera en la arquitectura Post-Modernista actual. Volviendo a un modelo de trabajo más contemplativo basado en la cultura Zen.

 

De esa forma de abordar un encargo, por el que cuando se finalice su construcción, el edificio en cuestión va a tener en cuenta si va a residir una persona o una familia, demandando unas condiciones de habitabilidad singulares sabe mucho el arquitecto japonés Uno Tomaki. Que en el transcurso de las dos últimas tres décadas de trayectoria e intenso trabajo.


Ha alternado en su amplia cartera de proyectos, diseños más formales y de carácter más actual con otros en los que se observan de forma destacada como ha recurrido ha prácticas locales. Que pese a estar prácticamente en desuso y carecer de documentación se ha mostrado como una solución excelente a la hora de afrontar situaciones.


En las que el cliente que va habitar la vivienda presenta unos requirimientos especificos, que demanda un espacio polivalente y modular. Modus operandi que se observa en proyectos como Ogimachi House o la Togoku House, en los que recurre a la aplicación de una técnica conocida como Ikatura.    

El Bosque dentro de la oficina en el encargo de Forest Office convierte el horario de oficina en algo mistico


La cual se define en pocas palabras en que permite a los futuros 
ocupantes de la vivienda contemplar el espacio con el que se relacionan adaptando los elementos que lo componen, en función de los requirimientos o gustos del inquilino en una época de su vida concreta. Concepción de la arquitectua que fomenta el vínculo del residente con el espacio que habita.


El cual pese a que los materiales empleados puedan parecer frágiles y deficitarios en propiedades como la bioclimatizacion, pudiéndose citar en este contexto el bambu o el cedro. Si, sin embargo, permiten desmontar los edificios fácilmente conservando la temperatura y la humedad en el interior de una forma estable. Mostrándose muy sólidos en términos inofugos frente a posibles siniestros provocados por la declaración de fuego.


En ambos ejemplos tanto en la casa Togoku construida en la ciudad de Nagoya perteneciente a la prefectura de Aichi en la que nació Tomoaki en 1960. Localidas en la que ha pasado la mayor parte de su vida graduandose en el Departamento de Arquitectura, perteneciente a la Facultad de Ingeniería, en la Universidad de Kanagawa, en 1983. 


Como en la casa Ogimachi emplazada en un barrio de la misma ciudad que la anterior. Presentan detonantes similares, habiendo sido levantadas en parcelas de medidas en medidas, las cuales apenas toleran una edificación realizada sobre una sola planta siendo estéticamente muy discretas. Cuyo diseño geometrico guarda las dimensiones de un cubo que finaliza en un techo alto en el caso de la primera, en cuyo centro se abre un tragaluz gracias al que se ilumina su interior y un rectángulo alargado cubierto por un techo levemente inclinado en la segunda casa. 


Y que tienen que ver con matices tanto cuantitavos como cualitativos de sus ocupantes. Si en el caso de Togoku se edificaron dos alturas, prevéyendo que en un futuro se pudieran añadir más familias aumentando la densidad de miembros. En el caso de Ogimachi se recurrió a un diseño en el que a pesar de que se iban a emplear los mismos materiales; madera de cedro tanto para los tabiques como el mobiliario interior, y metal y pizarra para cúpula que protege las viviendas dándoles sensación de amplitud debido a su gran altura.


Los proyectos Tomoaki se nutren de un paisaje en el que las emociones y la memoria se alían para reflexionar sobre una arquitectura que su autor percibe como una experiencia sensorial.


Estaba destinada a ser habitada por un único individuo que reunía las limitaciones que comparten muchas de las personas que se encuentran en edad avanzada. Por lo que en el diseño definitivo se eliminaron todos aquellos elementos que se consideraron innecesarios y que por lo tanto, podían suponer un obstáculo en la movilidad del inquilino en el interior de una vivienda, en la que por otra parte iba a pasar la mayor parte de su tiempo.


Por lo tanto Tomoaki aplico un enfoque basado en lo que el ha definido como una arquitectura "curativa", priorizando aquellos aspectos humanitarios de una construcción que iba a ser ocupada por una mujer de edad avanzada. Casa situada en el centro de un pequeño jardin, en la que destacan los treinta y dos tragaluces fijos en la parte superior, de los cuales cinco más grandes se pueden abrir.  Un factor clave en el diseño que tiene en cuenta la relación entre lo privado y el espacio social y que sustituye a las ventanas, tanto en la fachada principal como en las secundarias.


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En el caso de Forest Office, un espacio de trabajo ritual en el que las horas de oficina se convierten en casi algo sagrado. Ubicada en los bajos de un edificio de oficinas en Nagoya, su acceso en sí representa un compromiso con tu labor. Ya en el interior las hileras de cedros desnudo de corteza conviven con un mobiliario espartano sobre el que apenas se proyecta un halo de luz.


Inspirado por el paseo de entrada al templo de Jingu situado en las proximidades de la ciudad de Ise. Podría parecer un espacio de recogimiento más que de trabajo, alejado del mundanal ruido que se percibe en el exterior y el estres. Siendo un proyecto en el que se puede apreciar la herencia artesanal de Tomoaki y la depurada técnica que emplea casi desde una óptica emocional. 



Anne Herringer, arquitectura sostenible y comprometida

 

Bajo el lema "architecture is a tool to improve lives", que traducido literalmente al castellano quedaria como "la arquitectura es una herramienta para mejorar vidas", la arquitecta alemana Anne Herringer  ha desarrollado una larga trayectoria.


En la que ha convertido en credo una forma de percibir y concebir la arquitectura, donde los elementos sociales y la incorporación en el diseño de materiales locales son los dos ejes principales sobre los que vasculan todos y cada uno de los diseños que emprende con su equipo desde su oficina en la ciudad alemana de Leufen.


Siendo la perspectiva del trabajo multi-disciplinar y colaborativo otra de las virtudes que se reflejan en unas construcciones, para las que Anna se desplaza con el objetivo de trabajar in-situ contando con la participación de los que en ultima instancia seran los benficiarios. (Ya sean los propios usuarios o algun intermediario como alguna ONG o asociación casi siempre local).


Que pone en antecedentes sobre las necesidades y requisitos que debe reunir el equipamiento con cuyos espacios finalmente se relacionaran cuando finalmente se den por acabadas las obras de acondicionamiento, cuyo resultado les permite a sus usuarios mejorar unas condiciones de vida sustancialmente respecto a lo que tenian hasta ese momento.

En su arquitectura se prioriza la selección organica


Estas pautas y valores de trabajo se pueden observar ya sea en su ultimo proyecto de 2020, que ha consistido en la construcción de un centro ocupacional y terapeutico destinado a atender las necesidades del colectivo de personas con diversidad funcional en Bangladesh. LLamado Anandaloy (que traducido sería algo como "profunda felicidad"). El proyecto que ha sido galardonado en la ultima edición del certamen de arquitectura social y sostenible Obel Award.


Guarda en su concepción todos y cada uno de los principios por los que los diseños de Anna conforman una identidad solida como arquitecta. En este caso ha utilizado el bambu como principal elemento constructivo de un edificio cuyas instalaciones estan adaptadas para que puedan ser utilizadas por personas con movilidad reducida, algo que en principio parece tan obvio en Occidente, pero que no se suelen acometer en paises como Bangladesh.


La arquitectura de Anna Heringer es una visión cuyo compromiso se relaciona con establecer una conducta cuyos valores con el espacio social y el medio ambiente permite crear espacios de convivencia comunes.


O el primero que tambien tiene como lugar de operaciones Bangladesh, (un pais con el que mantiene un vinculo idilio creativo desde que finalizo su formación en 2004 por la Universidad de Arte y Diseño de Linz). En este primegenio diseño el esbozo fue el de una escuela en la que iban a recibir clases una comunidad educativa perteneciente a la localidad de Rudrapur.


Trabajo en el que Anna invirtio casi un año, siendo el lugar donde maduro una incipiente sensibilidad por aplicar una arquitectura donde las dinamicas sociales endemicas del lugar, se conjugaran con las caracteristicas del paisaje local como fuente de materiales de origen sostenible y que no por eso dejaran de aportar al proyecto emprendido un alto rendimiento social.

Estéticamente cada edificio obedece al paisaje donde opera 


Este intervalo de tiempo le sirvio a Anna para acumular conocimientos que en el trancurso de su carrera a aplicado en una diversidad de proyectos donde la cooperacion con paises en via de desarrollo y el activismo, se han plasmado en instalaciones de todo tipo construidas en paises tan distantes uno de otros (no solo geograficamente sino culturalmente.)


Como pueden ser Marruecos, China o Zimbabue, donde a las tecnicas ya mencionadas se han incorporados soluciones energeticas y climaticas basadas en tecnologias renovables, y cuya consideración son contempladas obedeciendo a las caracteristicas medio-ambientales intrinsicas de cada lugar donde se trabaja. Algo que en este ambito obliga hacer concesiones en el diseño original, pues a las limitaciones tecnologicas hay que añadirle la carencia de recursos economicos. 


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Lo que obliga a buscar financiación, objetivo que se logra a traves de poner en marcha campañas solidarias o de contar con la inyección de dinero obtenido a traves de fundaciones o colectivos de ayuda mutua, sin cuya participación muchos de estos proyectos serian poco mas o menos que inviables.


Rwenzori, trekking entre el Ecuador y la Luna en África


Da que pensar que por los caminos y senderos que en la actualidad son recorridos por miles de excursionistas formando parte de un paisaje que poco a poco y de forma inexorable se esta domesticando, hasta hace relativamente poco tiempo representaban los lugares de paso de unos cuantos intrépidos exploradores que trataban de situar las fuentes del Nilo.

Y una corte de depravados tratantes de esclavos que exterminaban aldeas enteras a lo largo de lo que se conoce como la cordillera del Rwenzori o montañas de la Luna, aunque en realidad se llaman Rwenjura (por su abundante régimen de lluvias).

Se trata de un basto territorio  situado en la frontera entre Uganda y el Congo, compuesto por diferentes ecosistemas por cuyas características y aislamiento se pueden considerar desde el punto vista medio-ambiental únicos en el mundo.

En total la reserva natural catalogada por la Unesco como Biosfera de la Humanidad por su gran valor faunistico, pero sobre todo por que cuenta con un registro de flora cuyas variedades tan solo se pueden encontrar entre sus laderas.


UN PASEO POR UN VERGEL CONSERVADO INTACTO DURANTE MILLONES DE AÑOS
 
Cuenta con poco mas de 100.000 hectáreas que abarca un territorio caracterizado por una cadena de picos entre los que destaca el monte Stanley o Margharita, que con sus 5.109m es la tercera cumbre mas alta de África después del Kilimanjaro y el monte Kenia

Siendo una de las pocas cadenas montañosas de África con glaciares, aunque buena parte de ellos se encuentran debido a los efectos del cambio climático en retroceso, aunque todavía se pueden ver en toda su plenitud los que a los pies del lago Kintandara o los que desembocan a lo largo del Rio Nyamwamba.

El principal curso fluvial de una región donde el viajero se podra internar en los frondosos bosques nubosos y maravillarase con una presencia de especies únicas como las Lobelias gigantes o los Dendrosenecios, formando un registro de hasta 278 especies.

De las que el 81% son endémicas de Africa oriental y el 19 % solo se encuentra en estas zonas mas escarpadas de la cadena montañosa. La vegetación depende mayormente de altitud, distinguiendose cinco zonas que oscilan entre los 3000 metros del bosque de Bambú.

Y los poco mas de 4500 de Bamwanjara, pero lo que hace realmente unica a la región en términos conservacionistas es la que como producto de estar en la franja delimitada por el Ecuador, creando un entorno ecológico único en el mundo.


GLACIARES Y BOSQUES DE BAMBU EN LA FRANJA DEL ECUADOR

Donde ademas de completar algunos de los mejores trekking del mundo, nos podremos desplazar al Sur de la región para visitar las comunidades de los Baamba y los Konjo situadas en el distrito de Bundibugyo, y el Lago Alberto, en las estribaciones del Ruwenzori. 

O ya en territorio de la Rep.Dem. del Congo en la Región de Kivu-Norte, y asistir algunas de las muchas ceremonias rituales en los poblados situados en las estribaciones del norte del monte Ruwenzori, que alberga la cuenca principal de captación vital de agua.

De la que se alimentan los Lagos Edward y George, registrando la mayoría de las fuentes que abastecen al Rió Nilo. Se estima que 500.000 ugandeses dependen para su abastecimiento de agua que proviene de las Montañas Rwenzori. 

Además de sus especies animales autóctonas de monos, damanes y camaleones jackson (especie endémica con tres cuernos). Pero si el viajero para finalizar su visita a la zona, quiere conocer algo mas de la cultura local.

Debe dirigirse Kilembe ciudad de aproximadamente 8,5 kilómetros cuadrados y que se encuentra a orillas del río Nyamwamba. Conocida por sus Minas de cobre y cobalto se ha convertido en el punto de encuentro desde el que gestionar todos los tramites relacionados con la amplia oferta de actividades que se pueden realizar en la zona y el lugar perfecto en el que pasar el periodo de aclimatización antes de ascender a las montañas de la Luna.

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La cordillera de Rwenzori entre Uganda y Congo posee un ecosistema único, debido a que su región esta cruzada por el Ecuador y que todavía a día de hoy se encuentra parcialmente aislada.



IBUKU, arquitectura de Bambú que desafián los sentidos


El ver a su padre, un ciudadano canadiense que viajando por el mundo acabo instalandose en Bali, e invertir buena parte de su tiempo en diseñar y montar cada una de las joyas que de forma artesanal posteriormente vendía entre sus clientes.

Supuso para su hija, la arquitecta y emprendedora Elora Hardy el mejor caldo de cultivo. Concediendole la oportunidad de crecer viendo, como la gente con la que convivia construía sus propios hogares utilizando materiales autóctonos.

Experiencia que años después se materializó en la fundancion de su propio estudio. Hecho que se produjo cuando tras finalizar su periodo de formacion. En el transcurso del cual pudo adquirir y consolidar los principios de su practica arquitectónica en el proyecto Ibaku, un proyecto que transciende lo meramente estético.

Profundizando en la comprensión de las técnicas y los materiales de construcción que tradicionalmente se han empleado en buena parte de las islas que conforman la actualidad el archipiélago de Indonesia, actualizando sus estandares en un contexto actual.


SUPERANDO LAS DEBILIDADES DEL BAMBÚ, PARA ABORDAR LOS DESAFÍOS DE LA ARQUITECTURA ACTUAL
 
Lo que le ha llevado a ella y su equipo a revalorizar una serie de practicas ancestrales añadiéndoles tecnologia actuales, a través de las que lograr que sus edificio
s se conviertan en un fenómeno global. Por lo que decenas de arquitectos de todo el mundo han recogido esa simiente.

Basada en su desarrollo del conocimiento alrededor del cultivo y tratamiento de una especie vegetal como el bambú, para extrapolar esas habilidades adquiridas en cursos organizados por la propia Elora. A lugares tan opuestos climatológica y paisajisticamente como son el Centro-Europa y América del Norte.

Y que tras realizar pequeñas modificaciones les permita adaptarse al medio, demostrando que el bambú como material constructivo reune las condiciones. Que permite que sea utilizado bajo casi cualquier circunstancia y entorno.


BAMBÚ: VERSATILDAD PARA UN ENTORNO EN PERMANENTE CAMBIO

Pero antes de que Elora y su equipo consiguieran llamar la atención de la comunidad, tuvieron que corregir determinadas adversidades. Que tenian que ver con el tiempo empleado en el cultivo de las vainas de bambú, reforzando sus características de flexibilidad y resistencia, así como agilizando su periodo de crecimiento.


Además de corregir su mayor handicap que tenia que ver con la voracidad que demuestran las termitas, las que creán nuevas colonias allí donde se construye con bambú. Para eso John (el nombre de su padre) desarrollo un compuesto en su campamento de Green School, a partir de una solución basada en Boro extraído de un mineral muy abundante conocido como Borax.

Que tras ser aplicado a las vainas crea una barrera protectora que produce un efecto disuasorio de las termitas y por lo tanto el alargamiento de la duración media de  los edificios de los que forma parte.


Ibuku es un estudio de arquitectura pionero en el uso y recuperación del uso del bambú como material contructivo, creando un nexo de unión entre la tradición, la ordenación del territorio su paisaje y su conservación natural.


Edificios que se caracterizan por sus formas inspiradas en el paisaje ocal y su facilidad de acceso, algo que al contrario de lo que se pueda pensar no es incompatible con una óptima climatizacizaión y una rango de confort elevado.

Virtudes que se pueden observar y experimentar en dos de sus proyectos mas representativos hasta la fecha como son Sharma Springs (2012) o el Ananda House (2015). Propuestas residenciales, donde las disparidad en las alturas (hasta seis en la primera por una en esta ultima), no supone ningún reparo consustancial a las pautas a seguir en proceso de construcción y diseño original.

Protagonizado como en mayor o menor medida en el resto de sus numerosas intervenciones, por el gusto por las formas curvilíneas y espacios multiusos siendo un claro su ultimo gran proyecto Bambu U.

Iniciativa de carácter educativo cuyo ámbito de actuación académico va dirigido a una amplia variedad de estudiantes y profesionales, relacionados con la arquitectura y la ingeniería. Desarrollado en colaboración con la organizacion local The Kul Kul Farm, se trata de crear un ecosistema a partir de los que crear un flujo bilateral de intercambio de conocimientos e ideas entre sus asistentes. Y que permita reflexionar sobre las soluciones ante los que se enfrenta la arquitectura en terminos no solo arquitectonicos, sino sociales y fundamentalmente medio-ambientales. 

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