En muchos de los trabajos del fotógrafo digital Caras Lonut se observa dos constantes, por una parte vemos la naturaleza representada mediante diferentes especies, en ocasiones siguiendo patrón crudo y descarnado.
Animales salvajes que son tratados como mascotas acompañados casi siempre por niños, en un viaje donde las atmósferas oníricas nos describe un universo mágico. En el que la naturaleza esta siempre omnipresente.
La otra es su peculiar tratamiento del color, matiz que sin duda logra gracias a la aplicación de una variedad de filtros. Con los que trata cada imagen después del montaje que realiza con el photoshop (del que es un consumado experto).
Con los que consigue que la composición final de cada pieza tenga ese efecto tan tenue que evoca a tardes otoñales que transmiten serenidad e invitan a la meditación. Y que pueden recordar a algunos de los pasajes de los relatos de Edgar Alan Poe.
Nacido en Rumania en Febrero de 1.970, Caras alterna su carrera profesional, en la que ha realizado encargos para numerosas publicaciones. Con su afición por la fotografía digital.
Su imaginación y su trabajo están cautivados por los sueños y por las estaciones de otoño e invierno, a través de las que analiza el lado más oscuro de los deseos de un sujeto y sus sueños.
Ambitos en el que ha utilizado un lenguaje donde el surrealismo comparte espacio y discurso con elementos extraídos del universo natural. Representando paisajes en los que la nostalgia por una infancia que ya no volverá, se difumina entre trazos inspirados por la memoria del sueño y sus huellas impresas en el subconsciente.
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