Conservando uno de los patrimonios mas ricos y a la vez desconocidos pertenecientes a la cultura Islámica, y que haber sido sometido a mil avatares ha llegado hasta nuestros días, en forma de miles de escritos compuestos por manuscritos en forma de papiros, tablillas y legajos. Que como incunables han sido preservados en alguna de las treinta bibliotecas que todavía se pueden descubrir recorriendo su intrincada y polvorienta red de callejuelas.
Y que son las supervivientes de una red de alrededor de cien bibliotecas con las que llego a contar en su época de máxima de expansión, cuando Chinguetti según diferentes crónicas de la época contaba con censo de hasta 200.000 habitantes convirtiéndose en un punto importante de peregrinación religiosa y foco intelectual.
Argumentos que propicio que se creara una importante comunidad compuesta por eruditos pertenecientes a diferentes disciplinas, cuyo legado ha resistido el paso inexorable del tiempo hasta la actualidad. Estando disponible para poder consultado por cualquier especialista o viajero, acompañado por un entorno único donde los paisajes cautivadores del desierto se fusionan con la historia y el conocimiento, todo ello complementado con una excelente oferta gastronómica y cultural.
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