Al día de hoy no se conoce un lugar en la tierra que reuna unas condiciones tan adversas para el ser humano, como las que presenta la atmósfera de Marte. Y reproducir estas condiciones de forma artificial resultaría muy costoso desde el punto de vista económico.
Pero si existen localizaciones en áreas áridas que debido a sus características climatológicas, y altas temperaturas resultan idóneas para convertirse en un campo de pruebas. Donde poder observar como afectaría al organismo humano vivir en unas condiciones en principio tan desfavorables para su supervivencia durante largos periodos de tiempo.
Situado en un recóndito lugar del desierto de Utah en los Estados Unidos próximo a la localidad de Hanksville. En un paisaje esculpido por vientos demasiado cálidos que presentan medias anuales de hasta 50 grados. A principio de esta década un equipo interdesciplinar, formado astrónomos, físicos, bio-ingenieros y astronautas bajo el auspicio de la NASA. Crearon el campamento aéreo espacial Mars Desert Research Station (MDRS).
Este laboratorio compuesto por estructuras modulares, en las que conviven por periodos de 15 días tripulaciones compuestas por una medias de seis medios. Trata de reproducir lo mas fielmente, las condiciones de un ecosistema marciano, en donde la falta de oxigeno y las altas temperaturas, suponen un reto para establecer colonias terrestres viables.
El centro neurálgico de la MDRS es una unidad cilíndrica llamada "The Hab". Con un diámetro de ocho metros, la estructura de dos pisos montada sobre soportes de aterrizaje. Aunque se pueden añadir estructuras externas periféricas. En cada estación se realiza un estudio heredado del equipo predecesor donde se analiza mediante diferentes materias los aspectos mas relevantes del planeta rojo. Para eso disponen de una sofisticada tecnología por la que analizan muestras donadas por los laboratorios de la NASA.
Uno de los aspectos mas sensible de la misión es el estudio de las relaciones sociales de sus miembros, y su expresión psicológica. Para eso se monitorea y registran datos sobre la vida de la tripulación cada dos semanas. Esto incluye detalles como el estado psicológico, la ingesta de alimentos y el ejercicio. Teniendo que superar una serie de pruebas que aseguren su mas óptima adaptación a las exigentes condiciones de la estación.
En la estación MDRS además de poner a prueba la eficacia y viabilidad de una misión humana a Marte. El diseño de las operaciones son de una complejidad considerable a resolver, con el objetivo de estudiar las capacidades de los aspirantes a formar parte de una futura misión con destino a Marte o algún planeta cuya candidatura presente unas condiciones similares.