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Ernest Zacharevic, arte urbano solidario y conservacionista


Empujado por sus inquietudes ecológicas y condición como activista el artista urbano de origen lituano Ernest Zacharevic, tras un largo peregrinas que le lleva a recorrer medio mundo, periplo mientras el que continua formandose, finalmente se asienta en la ciudad de GeorgeTown capital de la isla de Panang en  Malasia.

Donde tras un periodo de adaptación comienza a obtener una repercusión inusitada debido a una serie de intervenciones en el ámbito publico, a través de las que denuncia lo que a su juicio es una situación de violencia crónica.

Alegato que acaba por enfurecer a las autoridades locales, las que finalmente deciden borrar o para ser mas precisos cubrir, la intervencion titulada Children on Bicycle and Boy on Motorcycle obra de 2012. Y cuya escena protaganizada por dos figuras de lego que en tono muy crispado, sirven para describir graficamente una situación social donde la violencia es cotidiana.


ARTE URBANO COMO TERMÓMETRO SOCIAL, AL PARTIR DEL QUE REACCIONAR
 
Y que en síntesis define cual es el propósito principal que persigue todas y cada una de las actuaciones realizadas por Ernest Zacharevic hasta ahora, y cuya estrategia explicada por el en el transcurso de la comparecencia que tuvo la oportunidad para el programa TED.

Se resume en crear una narración estética cuyos elementos permitan al observador identificarse, creando una asociación de ideas cuyo detonante sea una reacción a partir de la que se posicione sobre un asunto o situación en particular.

Dialéctica que persigue crear una complicidad solidaria entre la opinión publica a través del que sujeto tome conciencia activa, sobre los grandes desafíos principalmente medio-ambientales a los que nos enfrentamos debido al cambio climático.


UN GRITO DE AUXILIO POR LOS ORANGUTANES DE SUMATRA

O a la deforestación criminal que se esta perpetrando en grandes extensiones de Indonesia, Papua Nueva Guinea o en la Isla de Sumatra. Donde el cultivo indiscriminado de grandes extensiones de terreno destinadas al aceite de palma.

Esta provocando no solo la alteración de todos sus ecosistemas sino la practica aniquilacion de buena parte de la biodiversidad que existe en la zona, y cuya máxima encarnación esta representada por el orangután de Sumatra.

Unico gran homínido endemico de la zona y cuyo numero de individuos se ha reducido drasticamente debido al expolio provocado por la industria relacionada con el aceite de palma. Situación extrema que ha conducido a que Ernest en colaboración con SOS Sumatran Orangutan Society y con la OIC Orangutan Information Centre.

Ponga en marcha el proyecto Splash and Burn, iniciativa que a través de actuaciones realizadas sobre el terreno, trata de concienciar acerca de la situación agónica a la que esta abocada esta especie única en el mundo y de la que tanto tenemos que aprender todavía.

La ultima intervención publicada a primeros de Febrero tenia por escenario una extensión de 20 hectáreas que gracias a las donaciones obtenidas por SOS, a través de la campaña #SOSsumatra se han incorporado a la reserva natural del orangután. 

En este caso Ernest actúa sobre una parcela que hasta hace poco era selva virgen, siendo previamente talada se había transformado finalmente en un mono-cultivo donde miles de ejemplares de hoja de palma había parasitado el territorio expulsando a sus habitantes.

Ahora recuperada como reserva natural sirve como reclamo visual en el que el artista a través de utilizar la masa forestal, crea un mensaje de auxilio que se recorta entre las copas de los arboles y el claro del bosque pudiéndose leer desde el cielo.
   
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Michael McGillis, el arte del paisaje como mensaje ecológico


Aunque no se caracteriza por ser muy prolífica cada intervención del artista con sede en Detroit Michael McGillis, esta definida por unas constantes mediante las que trata de crear un vinculo entre el medio natural y el ser humano.

Presencia cada vez mas esporádica y distante, siendo este cambio de percepción uno de los motivos principales, tanto del deterioro de los diferentes ecosistemas que lo forman como de la perdida de bio-diversidad que esta íntimamente relacionada con su proceso evolutivo y social.

Por el cual el urbanita que reside en ciudades cada vez mas masificadas y artificiales, donde la naturaleza ha sido domesticada convirtiéndola en un sofisticado souvenir, ignora y por lo tanto permanece ajeno a los bioritmos y ciclos que se rigen el medio natural.

Habiendo reducido su relación con su habitat natural a un objeto de consumo esporádico y trivial que se consume bajo determinadas condiciones, por lo que la naturaleza se convierte en un producto de consumo puntual que se adapta e integra formando de una estrategia mercantilizada del territorio.

MOTIVACIÓN QUE INSPIRA LA ACCIÓN

Formado en la Bachelor of Fine Arts Center for Creative Studies, Detroit en Michigan, en la que se licencia en 1989 no es hasta bien entrada la década siguiente cuando este coleccionista de dioramas, comienza a realizar sus primeras incursiones en campo abierto.

Primerizas obras donde ya se pueden observar las preocupaciones de su autor por la desconexión que se establece del individuo respecto a su entorno natural, y la sustitución de este medio contemplativo, por uno donde la tecnología cada vez mas venerada como si fuera un totem modifica su percepción relativa del tiempo y espacio.

Dinámica que amparada en una época convulso y marcada por una transición de una economía basada en un modelo productivo, a uno donde la prioridad es el consumo y las desigualdades que genera, tiene una repercusión directa sobre el clima y los diferentes ecosistemas que regula.

CREANDO VINCULOS EMOCIONALES CON LA NATURALEZA

De esta forma Michael actualiza el significado  del  ethos- pathos y logos de un individuo que pasa de ser deudor y dependiente del medio natural con el que co-existe, a convertirse en su dominador omnipotente elaborando su particular discurso estético moldeando el paisaje que le rodea.

Lo que produces un escenario desconocido hasta ahora que provocas serias dudas e interrogantes en el observador de su obra y su consiguiente reflexión sobre lo que ve. Con ese objetivo incorpora materiales cotidianos con los que cualquiera nos podemos identificar, como pinturas, bolsas, cerámicas o cables (entre otros).

Que recicla y combina con residuos forestales con los que crea obras que simboliza la ruptura que se viene produciendo entre la civilización y el planeta que lo acoge. Situación que se escénica en obras como Curved Rige que data de 1998, donde un camino formado por tocones de arboles previamente talados, se interrumpe abruptamente.

O en la obra titulada Flou Line de 2007 donde una masa vegetal es recorrida por un fluido que sangra que representa la turba que arde, o por ultimo en su obra mas representativa hasta la fecha Wake, intervención realizada por encargo del Parque de Franconia Sculpture Park de Shafer  en Minnesota, que consta de una zanja de cincuenta metros de largo compuestaa por troncos cortados a ras y encarnados que colocados ambos lados, representan el cauce de un rió seco.

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 Las intervenciones del artista de land art Michael McGillis trabajan con valores como la ecología o el compromiso natural, creando espacios de reflexión y compresión mutua.


El fotógrafo Christian Åslund constata graficamente el retroceso espectacular de los glaciares por el cambio climático


Los glaciares de Svalbard son un conjunto de ríos helados formados hace millones de años, cuya ubicación se encuentra en el archipiélago homónimo perteneciente aguas territoriales Noruegas.

Y que debido a su situación y exposición a los efectos del cambio climático se han convertido en uno de los mejores indicadores de las nefastas consecuencias y del grado de deterioro a los que están siendo sometidos los diferentes habitas que conforman el planeta Tierra.


Siendo uno de sus principales y preocupantes síntomas el deshielo y retroceso que se observa en la mayoría de los glaciares, esas perpetuas e incolumes lenguas de hielo que ante de desembocar en el mar o grandes lagos dejan desprender enormes trozos de hielo causando un estruendo sonoro al precipitarse contra la superficie del agua. Convirtiéndose en los icebergs que vagan hasta diluirse mar adentro.

EL ANTES Y DESPUÉS DEL DESHIELO

Y que desde que saltaron las alarmas medio-ambientales a finales del Siglo XX relacionadas con el aumnento de las temperaturas en terminos globales han sido objeto de estudio de numerosos equipos cientificos. Que los han convertido en paradigma del estres bio-climatico al que esta siendo sometido el mundo que habitamos.


Y cuyas heridas han sido capturadas por el fotógrafo Christian Åslund, cuya labor como documentalista de la naturaleza esta enfocada en trabajar sobre el terreno, generalmente en aquellas zonas cuyos ecosistemas se están viendo mas afectados por el cambio climático. Habitual colaborador de Greenpeace uno de su ultimos reportajes consiste en una selección de fotografías.


DOS IMÁGENES MEJOR QUE MIL PALABRAS

Cuyas instantáneas tomadas en la actualidad ponen en perspectiva permitiendo  hacer una comparación con las que fueron realizadas en blanco y negro hace cien años, más concretamente a principios del Siglo XX. Constatando los cambios evidentes del retroceso que han experimentando los numerosos glaciares de las islas.  


Publicadas a primeros de año para apoyar la campaña #MyClimateAction,  cada pareja de fotografías que compone la serie nos hace tomar conciencia de la magnitud del problema y de las todavía imprevisibles consecuencias relacionadas con nuestra supervivencia como que perteneces a este mundo.


Provocando en él que las contempla un sentimiento de profunda desolación y estupor, acerca de algunas de las declaraciones que se emiten desde algunos estamentos cuestionando la veracidad de los acontecimientos bioclimaticos a los  que estamos asistiendo. Siendo los responsables en ultima instancia de la extinción de millones de especies, buena parte de ellas todavía a día de hoy sin censar y que en buena parte de los casos ya poblaban la tierra antes de que el ser humano hiciera acto de presencia


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HULA - Pūliki, pintando arboles en Hawai contra el cambio climatico


Hula o lo que es lo mismo Sean Yoro, tuvo una trascendencia inusitada a partir de su serie de retratos parcialmente sumergidos de "sirenas", con los que la artista se posicionaba denunciando los efectos desastrosos para el planeta del cambio climatico.


Realizados en los margenes de diferentes afluentes a su paso por grandes ciudades a lo largo de 2.015 y 2.016, donde fueran accesibles visualmente. Hula lo enfocaba como acciones de concienciación global, emotivas y cargadas de lirismo ecológico. 

Donde la solidez del paisaje urbano y el estoicismo que mostraban las modelos mientras se sumergian en las aguas procelosas del rio, que no dejaban de estar distantes de las áreas naturales. Donde por su incalculable biodiversidad se hace mas perceptible la magnitud de los efectos del paulatino incremento de la temperaturas.


Relación causa efecto que es mas apreciable en su ultimo trabajo, para el que a comienzos de este año se traslado a una reserva natural situada en la Isla de Hawai, donde recientemente se había producido un devastador incendio que habia afectado gravemente al conjunto de los ecosistemas que lo componen. 

Titulada Puliki, como en anteriores ocasiones la protagonista es la mujer pero en este caso la actitud que adopta es de protección en relación a su entorno, tratando de abarcar con sus brazos el diametro formado por un conjunto de arboles que languidecen chamuscados en lo profundo del bosque.   

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Jugando con la percepción óptica del observador la ultima acción de Hula, transmite su preocupación ecológica simbolizandola a través de un gesto maternal de comunión y compromiso con el planeta Tierra.