Observando como diferentes especies silvestres de aves, utilizaban las hendiduras y recovecos que se habían creado en la corteza de los arboles para anidar. El diseñador holandés Roel de Boer ha creado unas vainas que se nutren del ecosistema existente en los arboles.
Facilitando las condiciones para que residentes humanos puedan pasar largas temporadas viviendo en un árbol en comunión con la naturaleza. Las cápsulas orgánicas se pueden elaborar de diferentes tamaños en función del ejemplar de árbol donde se vaya anidar. Fabricadas a partir de materiales híbridos compuestos por deshechos orgánicos y reciclados como cartón.
Su presencia en el espacio publico generaría conciencia sobre la importancia del entorno natural en nuestras ciudades. Las unidades residenciales sobre las que esta trabajando Roel precisarian de la mínima infraestructura para su mantenimiento, disponiendo de la mayoría de los servicios en módulos situados a pie de calle.
Con el objetivo de que la habitabilidad en la cápsula no suponga un deterioro irreversible para el arbol que lo alberga, y por otro lado se generaría actividad social a través de la relación de sus medios.
Boomwonen o casa árbol se reduce a lo esencial. Un lugar para sentarse y dormir, el resto de la casa se extiende a través de la ciudad en la que diferentes equipaciones contienen los elementos necesarios: restaurante, cine, sauna, biblioteca ... y así sucesivamente.
De esta forma servicios domésticos como lavandería, restauración o aseo personal se concentrarían en un solo punto siendo gestionados por los propios residentes. Que adoptan las decisiones en función de las necesidades que surgen en una comunidad donde sus miembros participan activamente.