Situado en la vertiente de los Alpes Austriacos más concretamente en el lado norte del Tirol, donde nos encontramos las cotas de más altidud que se reparten entre los valles de Passeiertal y de Ötzta.
Se trata pues de una región abrupta paraíso para alpinistas, destinado a escaladores de media montaña. Nevado la mayor parte del año, se esta convirtiendo en un polo turístico para esquiadores y escaladores. Pero además el viajero que tenga inquietudes mas allá de las del deporte de aventura.
Puede disfrutar de un atractivo más relacionado con la cultura de la escalada y la vida en la alta montaña, un edificio cuyo diseño se basa en dos principios. El primero está relacionado con su capacidad de adaptación a un entorno natural tan bello como hostil.
Y por otra parte el museo Pass Museum que forma de la oferta turística de The Timmelsjoch, presenta un enfoque estructural cuya función cumple con el tratamiento del espacio divulgativo y expositivo a la par que lúdico al cual se iba a destinar sus instalaciones.
Diseñado por el arquitecto Werner Tscholl. Se trata de un proyecto que suponía todo un desafío desde un punto de la ingeniería pues al estar construido en voladizo, el edificio se tuvo contener en lo estético priorizando su estabilidad sobre una superficie de aspecto casi lunar.
Por otra parte un espacio expositivo donde el visitante puede realizar un recorrido por la historia de las hazañas de las expediciones alpinas. Colección que se puede contemplar en la sala principal llamada La Cueva de Hielo tenía que ser lo suficiente dinámicopara atraer la atención del visitante.
Partiendo de este razonamiento la estructura principal tenía que destacar en su entorno, similar en forma y medidas a la de un contenedor de carga. Este módulo se presenta parcialmente suspendido en el vació y levemente balanceado. Estando apoyado en un saliente elevado que permite que su sola presencia domine el valle de forma dramatica logrando transmitir toda la intensidad del paisaje alpino e integrándose en su entorno.
El Pass Museum cuenta con dos grandes aberturas situadas en ambos extremos, en la orientada al norte se sitúa la entrada que da acceso al hall, en el lado opuesto. Un gran ventanal proporciona la luz natural que se cuela en su interior.
El edificio se proyecta hacia el exterior suspendido sobre el vacío presentado un silueta geométrica retangular. Diseño de corte minimalista que se completa con un acabado en tonos tierra, inspirados en la gama de colores que se observan en la cadena de montañas del que forma parte.
El volumen interior esta esculpido imitando el escarpado exterior del farallones sobre el que se asienta, creando un diálogo y fluido entre el paisaje remoto donde está ubicado y su concepción como equipamiento dedicado a la documentación e historia alpina.
Como ya hemos citado además del museo el visitante podrá disfrutar en The Timmelsjoch de atracciones como el mirador Walkway, la escultura Smugglers, o la pasarela Timmelsbach Bridge. Una experiencia visual que te proporciona una panorámica excepcional y única de los Alpes austriacos.
En otro sentido el telescopio Scheibkopf emplazado en una espaciosa caverna excavada en la montaña, desde cuya lente el observador puede abarcar la practica totalidad dela reserva natural y espacio protegido de Texelgruppe. Situado ya en territorio italiano al otro lado del Passo Rombo.