Mostrando entradas con la etiqueta nanotecnología. Mostrar todas las entradas

Nuevo diseño para la batería de iones que almacena 7 veces mas de energía


Las tecnologías limpias cada vez dependen más de las baterías, en particular de las que estan fabricadas con iones de litio. Todo, desde los coches eléctricos, las soluciones de almacenamiento para instalaciones de energía renovable, así como casi todos nuestros gadgets como por ejemplo moviles portátiles utilizan este modelo de almacenamiento. El que debido a su intenso uso ha experimentado una mejoria en las especificaciones que presenta, sobre todo en su capacidad de almacenamiento y durabilidad, inconvenientes que ante las nuevas necesidades la tecnologia actual esta llegando a su limite de su capacidad.

Investigadores del Laboratorio Ambiental de Ciencias Moleculares (EMSL), han desarrollado un innovador prototipo que mediante el uso de nanopartículas de silicio que ala hinchanse aumentan la cantidad de iones de litio que pueden ser almacenados, multiplicando por siete la cantidad de energia que podria llegar almacenar, alargando la vida util hasta cinco veces las actuales. Este avance podría conducir a la fabricación de baterías que no sólo poseen mas capacidad para almacenar mucha más energía, sino que reducen los costes de fabricación  en su fabricación a escala industrial ademas de alargar su vida util, lo que abre un sin fin de posibilidades.
Las propiedades de las baterías de Li-ion, como la ligereza de sus componentes, su elevada capacidad energética y resistencia a la descarga, la ausencia de efecto memoria o su capacidad para operar con un elevado número de ciclos de regeneración, han permitido el diseño de acumuladores livianos, de pequeño tamaño y variadas formas, con un alto rendimiento, especialmente adaptados para las aplicaciones de la industria electrónica de gran consumo. Desde la primera comercialización a principios de los años 1990 de un acumulador basado en la tecnología Li-ion, su uso se ha popularizado en aparatos como teléfonos móviles, agendas electrónicas, ordenadores portátiles y lectores de música

Las baterías de ión litio generan electricidad debido a la circulacion de los iones de litio a través de un electrolito. En una batería completamente cargada, los iones de litio se almacenan en un cátodo, de óxido de litio cobalto (LiCoO2), que es estable en el aire. Cuando está en uso, el flujo de iones de litio flujo desde el cátodo a través de un electrolito en el ánodo,  comúnmente de carbono.

Durante la recarga, los iones son empujados hacia atrás hacia el cátodo donde comienza su ciclo. Los investigadores han construido sobre la tecnología actual, creando un nuevo tipo de ánodo compuesto de nanopartículas de silicio individuales dentro de los depósitos de carbono, como las yemas de los huevos en el interior de la clara. En este nuevo diseño, el flujo  de iones de litio, viaja desde el cátodo a través del electrolito, difundiendose a través de las celdas de carbono, y en el silicio, que puede contener diez veces mas particulas en forma de iones de litio.

Hojas artificiales producen hidrógeno, empleando energía solar


Investigadores del departamento de Dispositivos Fotovoltaicos y Optoelectrónicos de la Universitat Jaume I, de Castellon, dirigidos por el profesor Juan Bisquert, han desarrollado, utilizando componentes basados en tecnología nanotecnologíca, un dispositivo con materiales semiconductores que genera hidrógeno a partir del agua utilizando únicamente la luz solar.

Inspirado en el fenómeno de la fotosíntesis que se produce de forma natural (un proceso por el cual las plantas utilizan la luz solar para transformar la materia orgánica en compuestos orgánicos, liberando la energía almacenada en los enlaces moléculares del trifosfato de adenosina, obteniendo compuestos energéticos, como azúcares o hidratos de carbono). La fotosintesis artificial, que es como se ha denominado al proceso, produce de formas eficiente de hidrógeno a partir de materiales semiconductores y la luz solar constituye un reto crucial para  cambiar de paradigma hacia una tecnología basada en el hidrógeno. 

A pesar de la eficiencia energética del dispositivo todavía no es suficiente para que se considere su comercialización, explorándose diversas vías para mejorar su eficiencia y demostrar que esta tecnología representa una alternativa real para satisfacer las demandas de energía del siglo XXI. El hidrógeno es un elemento muy abundante en la superficie de la Tierra, en combinación con el oxígeno: el agua (H20). La molécula de hidrógeno (H2) contiene una gran cantidad de energía que se libera cuando se quema debido a la reacción con el oxígeno atmosférico.

Con el fin de convertir el agua en hidrógeno, la molécula de H2O debe dividirse en sus componentes esenciales, en este caso utilizando una técnica basada en la utilización de la radiación solar, (sin utilizar combustibles fósiles), y con ninguna otra ayuda, se provocan las reacciones químicas que separan el agua y el hidrógeno de forma similar a las hojas de las plantas. Por esta razón, estos dispositivos se han bautizado como hojas artificiales

El dispositivo se sumerge en una solución acuosa que, cuando se ilumina con una fuente de luz, forma burbujas de gas hidrógeno. En primer lugar, el grupo de investigación utilizó una solución, con un agente oxidante  estudiando la evolución de hidrógeno producido por los fotones. El siguiente desafío, según Iván Mora, miembro del equipo que ha desarrollado la solución, es entender el proceso físico-químico que produce el material semiconductor y su interrelación con el medio acuoso con el fin de agilizar el proceso del dispositivo. 

El desarrollo de la hoja artificial es un gran reto científico debido a la dificultad que plantea la selección de materiales que se utilizan en el proceso, trabajando de manera continua y no en descomposición. El equipo de la Universitat Jaume I es uno de los pocos grupos de investigación a nivel internacional que ha demostrado la viabilidad de un dispositivo de estas características, junto con los laboratorios de América del Norte en el MIT en Boston o NREL en Denver . El líder del grupo de investigación, Juan Bisquert, cree que en comparación con otros dispositivos, el que ha sido desarrollado por su equipo presenta la ventaja de reducir los costos de producción y de una mayor recolección de los fotones incidentes de la luz, utilizándose para la producción de hidrógeno fotones incluso del espectro infrarrojo”.

Desarrollan un satélite solar productor de energía


Si bien la energía solar ha sido durante mucho tiempo considerada como clave para resolver las demandas de energía del planeta tierra, el problema de la eficiencia y almacenamiento supone todavía un handicap, y aunque esta en vía de resolverse, todavía habrá que esperar hasta que madure tecnologicamente. Una de las vías que se están explorando en la actualidad, es la posibilidad de generar energía de origen solar en el espacio, aparentemente esta opción es la mas coherente,  cuanto mas próximo de este de la fuente productora de energía (en este caso el sol) mas intensa sera la radiación, fenómeno que incrementara la cuota de producción. Pero logisticamente se plantea un problema, el transporte de la energía recolectada hasta las plantas de distribución en la Tierra. 

Sin embargo, un equipo de ingenieros de la Universidad de Strathclyde en Glasgow creen poseer  la clave para que la energía solar producida en  una órbita espacial, no plantee grandes dificultades su traslado y consumo en la  Tierra. El equipo está probando actualmente un sistema que actuaría como una plataforma para que los paneles solares, produjera energía aprovechando el máximo espectro solar, permitiendo que sea transferido de vuelta a la tierra utilizando sistemas basados microondas o rayos láser.


Estos 'satélites solares" serían capaces de proporcionar al planeta una fuente inagotable de energía que permitiría, suministraría  de energía a zonas remotas y proporcionar energía a las áreas que son difíciles de alcanzar por medios tradicionales. El doctor Massimiliano Vasile, del Departamento de Ingeniería Mecánica y Aeroespacial de la Universidad de Strathclyde, que dirige la investigación espacial, piensa que el espacio ofrece una fantástica fuente para energía solar, con capacidad para producir energía independientemente de la hora del día o las condiciones climáticas. 

En un experimento sobre el Círculo Polar Ártico conocido como Suaineadh, fue un importante paso adelante en el diseño de un prototipo con una tecnología similar, a la de una sonda solar espacial, poniendo de manifiesto que las estructuras más grandes podrían ser construidas, preparando el camino para la siguiente etapa en el proyecto de energía solar espacial.

El proyecto actual, llamado SAM (Self-inflating Adaptable Membrane) pondrá a prueba el despliegue de una estructura celular ultra ligera, que puede cambiar de forma una vez desplegado. La estructura está hecha de células que son autoinflables en el vacío y puede cambiar su volumen de forma independiente a través nanopumps.

La estructura reproduce la estructura celular natural que existe en todos los seres vivos. El control independiente de las células permite transformarse la estructura en un concentrador solar que recoge luz solar y la proyecta a los paneles solares. La misma estructura se puede utilizar para construir sistemas de mayor tamaño en el espacio mediante el ensamblaje de miles de pequeñas unidades individuales. Si todo va según lo previsto, un día podríamos tener una red de satélites solares que esencialmente cosecharan energía solar y terminara con el déficit energético en el mundo.

Descubierta una variante del grafeno con la que poder acelerar el desarrollo de semiconductores



No hay duda de que el silicio como material ha revolucionado el mundo en que vivimos y ha sido la razón de muchos de los logros y los avances tecnológicos. Los transistores de silicio basados ​​son la clave para todos los chips de computadoras y los procesadores de teléfonos inteligentes que vemos hoy. En nuestra búsqueda de mejores y más rápidos los dispositivos electrónicos, nos hizo tropezar con el silicio y ahora lo han llevado a su extremo absoluto en términos de rendimiento y tamaño. Los dispositivos de silicio basados  no se puede conseguir más pequeños de lo que son ahora y los investigadores se han movido en la dirección de el grafeno como material potencial con el que conseguir tecnologías mas avanzadas.



El grafeno se basa en una sola capa de átomos de carbono que se organizan en una estructura de panal, en un intento de sintetizar los semiconductores y componentes de circuitos que se utilizan. 
Un equipo de científicos de la Universidad de Wisconsin en Milwaukee (UW-M) en Estados Unidos, dirigidos por Junhong Chen (ingeniería  mecánica) y Marija Gajdardziska (física) tropezó con el  Monóxido de grafeno como posible solución para desarrollar semiconductores. El descubrimiento que se realizo de forma accidental, ya que estaban tratando de obtener puras hojas de grafeno a partir de su investigación a partir de óxido de grafeno. El calentamiento de óxido de grafeno a diferentes temperaturas produjo cuatro sustancias diferentes que el equipo bautizo como el grafeno de monóxido de carbono (OGM).


El recién descubierto OMG exhibió diversas propiedades que permitió al equipo concluir que puede ser utilizado como un material semiconductor. Como OMG está formada en hojas, puede incluso utilizarse como un catalizador de superficie y el equipo que descubrió esta estructura única de OMG, piensa que sus propiedades semiconductoras son la esperanza para sintetizar semiconductores en un futuro.

El monóxido de grafeno es un descubrimiento reciente y tardara mucho tiempo, hasta que los investigadores comprendan todo su potencial. El equipo admite que todavía tienen que probar cómo responde OGM a diferentes temperaturas y cuan estable puede estar en condiciones reales de trabajo. La comprensión de cómo el calor afecta el monóxido de grafeno es el siguiente gran paso hacia adelante en esta investigación.

Rana 2, moto eléctrica con batería intercambiable de 30 años de vida


Hartmut Esslinger es conocido por haber colaborado con Apple en muchos de sus diseños de computadoras mas emblemáticos de los años 80 y principios de los 90, pero  su trabajo no se ​​limitó a Macintosh: la Rana es uno de los experimentos más salvajes creados por la firma que fundo el propio Hartmut  Esslinger.  Incluso el fabricante Yamaha se inspiro en su prototipo para diseñar FZ750 , habiendo siendo añadida a la colección del Museo de San Francisco como parte de la colección permanente de arte moderno.


Veinticinco años después presenta la Rana 2, que promete revolucionar el mundo de las dos ruedas, ya que funciona con baterías eléctricas, que pueden ser intercambiadas cuando se agotan. Aunque las características incorporadas en la moto ya se han integrado en muchas motos modernas, esta versión actualizada representa la evolución en la tecnología. Por ejemplo, la Rana 2 incluye tres núcleos en la batería que, presumiblemente, compuestos por las nanopartículas cristalinas de hexacianoferrato de cobre, aún en fase de experimentación. 

En pruebas de laboratorio, el electrodo ha resistido 40.000 ciclos de carga y descarga, después de lo cual todavía mantiene más del 80 por ciento de su capacidad de carga original. En comparación, el promedio de una batería de iones de litio puede alcanzar alrededor de 400 ciclos de carga/descarga antes de que se deteriore demasiado como para tener un uso práctico, teniendo una vida útil de hasta 30 años.


Las baterías situadas en la parte inferior del chasis debajo del espacio abierto, ayudan a reducir el centro de gravedad. El manillar se fija al chasis así que en vez de mover físicamente la parte delantera, el eBike utiliza medios electrónicos fly-by-wire en la dirección. Otras características que incluyen, una matriz OLED display digital y  conectividad en línea. La rana eBike iría acompañado de un casco equipado con el heads-up display con el seguimiento de la retina.


Desarrollan células solares biofotovoltaicas baratas a partir de vegetales

La comunidad científica lleva años investigado el desarrollo de  células solares a partir del conjunto de las moléculas dentro de la planta que realizan la fotosíntesis, conocidas como photosystem-I (fotosistema-I). Sin embargo, este material requiere una película delgada por deposición y tecnología óptica. Un estudio dirigido por el investigador Andreas Mershin perteneciente al MIT y publicado en el ultimo numero de Scientific Reports, describe un método mejorado para la fabricación de "biophotovoltaics" (biofotovoltaicos) productoras de energía de origen solar.  

Los complejos pigmento-proteína también contienen componentes específicos para la transferencia de electrones, que son importantes para la obtención de energía mediante el proceso de fotosíntesis. La organización de los complejos pigmento-proteína dentro de la membrana del tilacoide es tal que en realidad pueden ser distinguidos dos fotosistemas. Cada fotosistema contiene un conjunto de clorofilas y carotenoides conocido como pigmentos antena, por la función que realizan. 


Los investigadores del MIT imprimieron células solares en un papel del tamaño de dos por uno: puntos cuánticos, el resultado es  la creación de una célula solar  viable usando una combinación de nuevos materiales que aislan a las moléculas de PS-I y forman un conjunto de diminutos nanocables de óxido de zinc, así como dióxido de titanio esponjoso (TiO2) nano estructura revestida con el colector de luz material derivado de las bacterias. logrando una superficie semiconductora. Por último, se demostró una alta afinidad péptido motifs10 para promover la adsorción selectiva  de sustratos que pueden mejorar el rendimiento fotovoltaico. Estos materiales, se podrían al diseño de dispositivos sencillos, robustos y de rendimiento sin precedentes.

El avance representa una mejora de la eficiencia 10,000 por ciento respecto a las células solares anteriores producidas con materia biologica, a pesar de esta mejora todavía están lejos de ser productivas, ya que solo aprovechan 0,1 por ciento de la luz solar, tasa que aun esta muy lejos de ser rentable. La clave para la consecución de este gran mejora en la eficiencia,  fue encontrar una manera de exponer mucho más de la zona de PS- I por unidad de superficie del dispositivo al sol, la inspiración Mershin para el nuevo avance fue debido a una visita de un bosque de  pinos.

Debido a que el sistema es tan barato y sencillo, se espera que esto se convierta en una forma de conseguir electricidad a personas que nunca han sido considerados como consumidores o productores de energía solar" Se espera que las instrucciones para hacer un solar celular será lo suficientemente simple para ser reducido a "una hoja de instrucciones." El único ingrediente que se adquiría  serían los químicos para estabilizar las moléculas de PS-I, que combinados con residuos vegetales producirian.