Dublin Urban Farm, una granja urbana en una fabrica de chocolate


Mezclar las verduras y las hortalizas con el chocolate puede ser tentador, o por el contrario se puede convertir en un experimento cuyas consecuencias resulten imprevisibles. 


Si de lo que se trata es de reutilizar un antiguo edificio ubicado en el centro de Dublin. Donde hasta hace no mucho se elaboraban todo tipo de chocolates empleando métodos artesanos, para tras restaurarlo y acondicionarlo como huerto urbano.

Cultivar alimentos de temporada para los miembros activos de la comunidad, te interesas por la iniciativa. El proyecto Dublin Urban Farm arranco escasamente hace tres meses.



Primero contemplando el desarrollo de un amplio programa de actividades relacionados con la planificación, gestión y cultivo de granjas urbanas. Aunque el principal proyecto y cuyo trabajo implica mayor movimiento e inversión de recursos es el huerto urbano que esta en pleno proceso de montaje.



Además en sus instalaciones cuentan con talleres de aprendizaje horticola, producción de alimentos, carpintería, sistemas de ahorro de energía, ciclos ecológicos y  métodos de autogestión alimentaria.


Todos los materiales utilizados en la fabricación del mobiliario de las instalaciones de la granja, han sido recuperados en vertedores y de donaciones particulares. Es decir, la mayoría de los insumos utilizados en la producción tienen un origen sostenible.

En lugar de abono industrial, han decidido crear una planta de compostaje en la misma fabrica, con lo que ayudan a reducir el volumen de residuos que se producen en Dublin, fomentando de esta forma la reducción de la huella de carbono de la ciudad. 

Utilizando bicicletas recogen el material de desecho para la transferencia a la instalación de compostaje. Los diferentes cultivos germinan a cielo abierto, no utilizando en sus ciclos de cultivo ni pesticidas ni fungicidas.

Otro de los proyectos sobre los que quieren avanzar es la instalación de acuaponia, de la que se obtendrian nutrientes elaborados a partir de los excrementos de los peces. Con lo que se abonan los tanques del huerto.

Para finalizar cuentan con un área creativa denominada Chocolate Factory. Cuyas actividades que se realizan homenaje de la antigua actividad que se ejercía en la fabrica, y a través de la que se realizan convocatorias de carácter creativo y cultural, como cursillos y exposiciones de diseño, el arte, la música, la danza, la fotografía.