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Ai Weiwei con la intervención 14,000 refugee life Jackets denuncia la masacre de los refugiados syrios


Coincidiendo con la ultima edición de la muestra de cine de la Berlinale y utilizando como medio expresivo uno de sus edificios mas representativos, como es la emblematica sala de conciertos Konzerthaus Berlin. 

Mas concretamente la serie de seis columnas de su monumental entrada.  El artista y desidente chino Ai Weiwei quiso manifestar su indignación respecto a lo que el considera la inacción y pasividad de las autoridades Europeas, respecto a la situación dramática que padecen la decenas de miles de refugiados. 

En su mayoría desplazados debido al conflicto armado que desde hace mas de cuatro años ha convertido Syria en un país destruido desde los cimientos. Y que Ai Weiwei encarna cubriendo la superficie contorneadas de las columnas desde las bases hasta los capiteles con 14.000 de los chalecos de color naranja.


De las que muchas de las victimas portaban en el momento del desembarco en las costas de la isla griega de Lesbos. Donde se dirigían tras una larga travesía huyendo de la guerra siendo literalmente sacados del agua donde flotaban a la deriva a punto de hundirse.

Mientras eran testigos impotentes de como otros muchos compañeros de travesía habían perdido la vida ahogandose en su ultimo intento por alcanzar la playa que distaba a escasos metros. Montada en una sola jornada se trata de un intervención que tendrá continuación el año que viene con la instalación titulada Soleil Levant

Realizada en Febrero de este año en colaboración con la organización Cinema For Peace, el aspecto estremecedor de las columnas cubiertas simboliza el uso humanitario que se le dio al edificio durante la segunda guerra mundial.


La cual tendrá como marcó la fachada Kunsthal Charlottenborg, en el centro de Copenhague, Dinamarca. El nombre Soleil Levant se inspira en la pintura de Claude Monet Soleil Levant de 1872, en cuyo lienzo se representa el puerto de Le Havre al final de la guerra franco-prusiana de 1870-71. 

Mientras que Monet capturó la realidad política y social de su tiempo con barcos de vapor e imágenes de industrialización. En la versión de Ai Weiwei se centrará en describir el contexto político y social que nos está tocando vivir, trazando un paralelismo entre ambas epocas. 

El artista Ai Weiwei interpreta su primer papel como protagonista en el corto The Sand Storm,


Protagonizado por el artista desidente chino Ai Weiwei el cortometraje titulado The Sand Storm, en cuyo metraje nos propone una historia a través de la que nos traslada a un escenario no tan hipotético.

En el que debido a la escasez de agua y el exceso de población, el acceso a su consumo se encarece. Por lo que se genera un mercado paralelo gestionado por contrabandistas que hacen de su trafico un negocio fraudulento, afectando a la población y sus relaciones.

Como principal consecuencia se extiende el vicio y la corrupción. Ambientada en esta sociedad distopica, la trama de la cinta dirigida Christopher Doyle nos muestra el día a día de un repartidor de agua que en transcurso del cumplimiento de un encargo se ve involucrado en un episodio sentimental. 


Siendo testigo de las tensiones sentimentales que se producen entre los miembros que forman un triángulo amoroso, estableciendo un vinculo de causa efecto con la distribución de garrafas de agua que son servidas a precio de oro por los escasos compradores que pueden adquirirlas, produciendo situaciones de desigualdad. 

Filmado en localizaciones de Beijing, el corto titulado The Sand Storm, nos muestra una faceta desconocida del mediático artista Ai Weiwei. Interpretando un papel por el que se convierte en un observador de la  decadencia depredadora de una sociedad que acapara un recurso como el agua, cada vez más escaso. 
 
El cortometraje que podéis ver desde AQUI, es una colaboración del artista, que aunque no es la primera vez que se embarca en un proyecto multimedia, pues ya cuenta con una meritoria filmografia a sus espaldas. Si es la primera vez que participa interpretando un papel como protagonista.


Ai WeiWei - Forever Bicycles, la metafora de un genio de su pais


Un país tan inmenso como desconocido como es China, puede analizarse desde la aplicación de una diversidad de parámetros politico-sociales. Que sólo plantearlo resulta no sólo un desafío, sino una labor tan desbordante como temeraria que probablemente acabe disuadiendo a cualquiera. 

Que valore su limitado tiempo de vida. Quizás parezca una exageración esta afirmación pero sólo tienes que asomar al mapa geografico del gigante asiático, para tomar una mínima conciencia de la empresa que tratas de emprender. 

Por esta razón, quizas, el arte con su componente visual y su capacidad de sintesis, se postula como una excelente alternativa.  A la hora de querer destacar algun aspecto o rasgo de la cultura local, por mucho que eso implique abarcar más de lo que humanamente se puede. 


O de sin querer caer en la inflexión del estereotipo. Comportamiento del que a veces suele adolecer la practica artistica, por lo que es de agradecer que las 1.200 bicicletas escogidas por artista y activista chino AI WeiWei, una por cada millón de habitantes que forman la descomunal demografía que presenta el gigante chino.


No se quedó solo en una lectura efectista y sesgada de una sociedad que ha experimentado cambios sobresalientes en los últimos cincuenta años. Esta desproporción en la asignación de una bicicleta por cada millón de habitantes, revela una metáfora si se quiere dramática.


De una situación que puede colapsar los recursos de una sociedad en su transición de una economía estatalizada a una realidad económica donde el capital posibilita el derecho a la propiedad sobre el producto. La instalación titulada Forever Bicycles, es la única pieza nueva de las colección que ha reunido el artista Ai WeiWeiPara la primera retrospectiva que se dedica en su país a su trayectoria, y que se podrá visitar hasta el 29-01-2.012 en el Taipei Fine Arts Museum.



Olafur Eliasson/Ai WeiWei/Tomás Saraceno La Divina Comedia de Harvard


Si bien el poema épico de Dante es una alegoría sobre el viaje del alma hacia Dios, la Divina Comedia,  expuesta en el Harvard Graduate School of Design (GSD), es un viaje conjunto para explorar los temas de la Mente Olafur Eliasson, Historia Ai Weiwe y el Cosmos Tomás Saraceno


Conceptualmente expansiva, se trata de una exhibición que tiene como marco la Universidad de Harvard con todo lo que eso implica. Situada en su campus principal, se trata de una exposición que pretende explorar la convergencia entre el arte y su capacidad creativa y su potencial como narrativa activista. 

En el que la escala y la calidad de cada obra que se exhibe la convierte en una de las exposiciones más atractivas de la temporada. Igualmente la inclusión de Ai Weiwei, en particular, le da un sentido de urgencia porque, como es bien sabido. 


En este momento está encarcelado por las autoridades chinas por ser un crítico del estado Chino, en particular haciendo obras como la que se incluye en esta exposición.

En esencia se trata de un triptico compuesto por tres obras, la primera es la propuesta de Ai WeiWei, titulada escuetamente Sin título, se trata de una instalaccion en la que se observan las constantes tanto estéticas como conceptuales que poseen muchas de sus obras. 

Compuesta por un total  de nueve grandes pilas de mochilas para niños que suman alrededor de cinco mil en total. Todas y cada una de ella representa a un niño muerto en el terremoto de Sichuan de 2008 en China, instalaccion de duelo que se completa con una pista de audio en cuya grabación se nombra el nombre de cada niño. 

Por su parte la propuesta del artista danés Olafur Eliasson, con sede en Berlín, nos ofrece una pieza inmersiva titulada Three now en castellano Tres ahora, la instalación compuesta por cincuenta instrumentos científicos. Que invitan al visitante a interactuar con ellos y jugar con nuestras percepciones visuales y espaciales, como un espejo convexo que invierte imágenes. 

Por su parte el siempre imprevisible artista argentino Tomás Saraceno nos eleva a traves Cloud City cuya traducción al español Ciudad Nube resulta más poetica. Compuesta por un enorme globo transparente inflado con helio y cubierto con paneles solares, encargadas de suministrar de energía a las cuatro diminutas luces led que hay en su interior. Saraceno responde con Ciudad Nube, objeto inflable y por lo tanto en constante cambio, movido por tecnología solar y sensores ambientales.


Ai Weiwei el arte de las masas y su ritual como objeto emotivo


En las instalaciones del artista conceptual Ai Weiwei se observan características afines como aparte de su efecto masivo, propiedades como la uniformidad, o la multiplicación hasta el infinito de cualquier objeto.

Rasgos que forman parte de buena parte de sus propuestas, pero que el artista nacido en Beijing en 1957 utiliza para subliminal y cuestionar una realidad socio-politica, con la que el que como sujeto-politico se siente profundamente en desacuerdo.

Mostrando este malestar a través de prácticas creativas en las que paradojicamente recurre a expresiones colectivas, cuyos resultados nos presentan planteamientos estéticos en los que tu como espectador te puedes llegar a sentir desconcertado. Pues estimas que entre lo que percibí como experiencia creativa. 

Y entre lo que el artista de forma más o menos explicita trata de constatar a través de sus narrativas conceptuales y las motivaciones que las detonante, existen cuando menos alguna incongruencia en el abordaje en cuanto al discurso cuantitativo que emplea para articular un mensaje.


Que pretende ser directo y contundente  adoptando una dinámica activista con la que Ai Weiwei que actualmente tiene su sede en la localidad inglesa de Cambridge, trata de poner énfasis en aquellos temas que al le motivan o le inquietan. Como el nihilismo del que entiende que adolece el individuo contemporaneo, aspecto de una sociedad liquida, postmodernism y global.

Rasgos de la conducta que según su percepción se originan (entre otros sitios), en su país de origen. El cual se caracteriza por ser una comunidad etnico-antropologica condicionada por las pautas basadas en la aplicación de altas dosis de disciplina. fundamentos que sin embargo les ha permitido como país convertirse en la potencia que equilibra la hegemonía mundial.

Valores que definen a una gran nación que ha estado sumida en un letargo mientras no paraba de manufacturar en masa y de extender su cultura. Y que sin duda se tratan de  referentes que están representados en la obra del artista chino Ai Weiwei. Ya no sólo simbolicamente sino de formas más sutil espiritualmente.

Pues en los conjuntos escultóricos del desidente hay un alto porcentaje de práctica ritualista y de pertinaz auto-exigencia. Rasgos definitorios que se pueden constatar en unas obras en las que el volumen adopta su personalidad y ocupa su espacio gracias a la minuciosidad casi matemáticas en las Weiwei dispone  todas y cada una de las piezas que utiliza. 

En muchas ocasiones objetos cotidianos como sus cerrebrerimas arquitecturas en las que un objeto a la vez tan familiar y con tanta carga emotiva como una simple bicicleta. Al ser contemplada como material singular que se destina para que tras completar un proceso de apilacion se transforme en una obra cuya expresión artística puede ser más o menos inspiradora. Pero que sin duda logra su objetivo, que consiste en establecer un vínculo entre el objeto empleado y la expresión emotiva del receptor de la obra. 

Vínculos que se originan en su niñez, en su relación paterno filial. El padre de Ai era el poeta chino Ai Qing, el cual fue denunciado por las autoridades chinas. Por lo que en 1958, la familia fue enviada a un campo de trabajo en Beidahuang. En 1961, fueron exiliados a Shihezi, Xinjiang, donde vivieron 16 años. Tras la muerte de Mao Zedong y el fin de la Revolución Cultural, la familia regresó a Pekín en 1976.

En 1978, Ai se matriculó en la Academia de Cine de Pekín y estudió animación. Siendo en 1978, cuando forma parte del colectivo del grupo artístico de vanguardia Stars, junto con Ma Desheng, Wang Keping, Mao Lizi, Huang Rui, Li Shuang, Ah Cheng y Qu Leilei. En el que hasta que se disuelve en 1983, va creando su propio matriz y universo artístico en el que la memoria de determinados acontecimientos protagonizados por su figura paterna son determinantes en su larga trayectoria posterior.