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Angelo J. Guglielmo - The Monolith, arquitectura emocional entre las ruinas del paisaje

Conocida por sus postales urbanas pintadas sobre un lienzo tan peculiar y particular como son los vasos de solo uso en los que te sirven refrescos o café, lienzos cuyo contorno esférico sirven para representar algunos de los lugares mas emblemáticos de New York.


La artista Gwyneth Leech proviene de una familia de artistas que han crecido viendo generación tras generación, una ciudad que posee la capacidad de absorver cualquier tendencia y transformarla en un rasgo con identidad propia.

Caracteristica que ha incorporado Gwyneth a su ADN artístico especializándose desde muy temprano en pintura urbana, lo que le confiere un conocimento del terreno que pisa que ya quisieran poseer muchos técnicos urbanísticos. 

De hecho reside en uno de los distritos mas genuinos y que mejor describen esta carismática ciudad, como es el Midtown Manhattan, situado a cinco minutos del centro y germen de lo que en la actualidad es el corazón financiero de la ciudad.

Ella y sus pinturas se han convertido en testigo de excepción de los diferentes procesos de gentrificación por los que ha pasado la ciudad. Siendo finalmente víctima y testigo en primera persona de uno que debido a su cercanía ha tenido la oportunidad de contemplar y describir, desde el ventanal de su estudio situado en una planta de un edificio de West 39th Street.


LA ARQUITECTURA COMO PAISAJE EMOCIONAL
 
Viendo el día a día de la construcción desde los cimientos de un rascacielos que en lo que era un solar abandonado, se levantaba cubriendo y ensombreciendo la fachada de su propio edificio. 

Historia dramática que sedujo al realizador y activista local Angelo J. Guglielmo, Jr, conocido por haber dirigido en 2012 el trabajo titulado "The Woman Who Wasn't There", producción de 2012 rodada en formato de falso documental, y que estuvo nominada para los premios Emmy del año siguiente. 


The Monolith cuenta desde un enfoque donde las emociones se suceden intensamente, la historia de como la arquitectura puede transformar la vida de una persona, a través de la construcción de un edificio en un solar abandonado.


Contándonos la historia de un fraude llevado a cabo por una supuesta víctima de los atentados del 11S, cuyo testimonio falso conmovió a toda una nación llegando a liderar una de las mas importantes asociaciones de afectados.

Y que tras mantener varios encuentros con Gwyneth, traslado su equipo al apartamento de esta, para rodar lo que era una jornada en su labor como artista, desde que se levanta y sirve el desayuno, describiendo la preparación de los materiales de trabajo hasta que cae la noche y finaliza.


COMO CRECER DESDE PERDIDA A TRAVÉS DE LA ARQUITECTURA 

Todo desde una óptica cotidiana que coincide con la de los obreros que a escasos metros de su vivienda están levando un bloque, un muro de ladrillo, cemento y acero, que observa impotente como crece produciéndole una sensación de angustia.

Proceso catártico que se metaboliza a través del ejercicio de la pintura y que Angelo recoge a traves de todos y cada uno de los planos que compone The Monolith, que podeis ver AQUI donde Gwineth además y paralelamente nos describe las causas que condujeron a su hermana a suicidarse. Hecho dramático que a lo largo de practicamente todo el metraje flota como una sombra acaparando cada vez mas protagonismo a pesar de su ausencia.


“Looking out on this incredible panorama of Midtown Manhattan. With spires rising into the kind of triangular composition, parts of these buildings were reflected in other buildings and the clouds coming across it was different every single day and through the year. So the light as moved through the seasons, would hit the buildings in different ways so the shadows would change daily.

And that sky. It kind of transcended the confines of the city. It always was full of fresh possibilty.”

"Mirando este increíble panorama del centro de Manhattan. Con espirales que se elevaban en el tipo de composición triangular, partes de estos edificios se reflejaban en otros edificios y las nubes que lo atravesaban eran diferentes cada día y a lo largo del año. Así que la luz que se movía a través de las estaciones, golpeaba los edificios de diferentes maneras para que las sombras cambiaran diariamente.

Y ese cielo. Trascendió los confines de la ciudad. Siempre estaba lleno de nuevas oportunidades."
  
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